13.3.18

Un plan secreto para someternos a daños graves y constantes

EL MAYOR CRIMEN DE NUESTRO TIEMPO (1ª Parte)

Hace más de 20 años (dependiendo de donde ustedes vivan) que se están realizando en todo el mundo fumigaciones aéreas criminales con sustancias químicas tóxicas. Comenzaron en los Estados Unidos y después se extendieron a los países de la OTAN, pero ahora estas fumigaciones con aerosoles letales cubren el planeta entero. Aviones militares, privados y comerciales, se usan para cambiar drásticamente los fenómenos atmosféricos de nuestro planeta (lo que se conoce como geoingeniería). Sin que se debatiera públicamente y sin que se anunciara en los programas informativos, el ejército estadounidense dio comienzo a una agresión altamente tóxica contra nosotros que actualmente sigue en curso. 
Estos aerosoles se conocen con el nombre de chemtrails o estelas químicas, término que utilizan hasta los militares. En una entrevista Clifford Carnicom (uno de los principales investigadores de estos aerosoles) comenta el uso de la palabra chemtrails frente a “geoingeniería” o “aerosoles”, lo cual muestra cómo nuestras percepciones cambian dependiendo de las palabras. “El lenguaje no se produce de manera fortuita, y se utiliza para manipular y controlar nuestra conciencia y nuestra percepción. Se usa básicamente para camuflar el alcance de problemas muy reales”. 
Esta no es la primera vez que se utiliza a los ciudadanos americanos como animales de laboratorio desinformados. En pocas palabras, los planes para hacer daño a los civiles nunca han cesado. En 2001, Clifford Carnicom publicó un extracto de los juicios de Nuremberg sobre el consentimiento de los seres humanos con los que se realizan experimentos. Este consentimiento es imprescindible, pero no ha sido recabado para estos crímenes encubiertos. http://www.carnicominstitute.org/articles/nurem1.htm

Durante 25 años (entre 1945 y 1970), una secuela encubierta del Proyecto Manhattan llamada “Coalición Manhattan-Rochester” llevó a cabo pruebas con aerosoles e investigó “los efectos de sustancias radiactivas en la salud de poblaciones vulnerables de St. Louis sin su consentimiento”. Estos “estudios (radiactivos) patrocinados por el ejército se centraban en una zona urbana segregada y altamente poblada, en la que residían mayoritariamente personas de color con pocos ingresos”. 
Más recientemente, en 2013 en la ciudad de Nueva York, los confiados pasajeros del metro fueron fumigados con un gas tóxico. Unos carteles lo anunciaban de este modo: “El departamento de policía de Nueva York (NYPD) liberará pequeñas cantidades de un gas inocuo e incoloro en 5 distritos y en 21 líneas de metro. Esta prueba no tóxica realizada en el aire forma parte de la prevención de atentados terroristas. Se ruega a los clientes de la MTA (la Autoridad metropolitana del transporte de Nueva York) que guarden la calma” (nótese que dicen “clientes” y no “ciudadanos”). La operación fue financiada con una subvención de 3,4 millones de dólares destinada a la seguridad en el transporte y que provenía del Departamento de la seguridad interior de los Estados Unidos (Homeland Security); la llevaron a cabo el laboratorio nacional de Brookhaven (del Departamento de energía de los Estados Unidos), que desarrolló este gas indicador en los años 80, y el NYPD. En este artículohay más información.

El gas utilizado, al que probablemente fueron expuestos millones de pasajeros confiados, no era “inocuo”. Se trataba de un producto químico artificial denominado perfluorocarbono [PFC]. Está relacionado con la “aparición temprana de la menopausia”, con malformaciones en el feto, con síntomas gripales y con trastornos de las glándulas endocrinas, y “la exposición excesiva a este gas puede provocar daños en el cerebro y en el corazón”. ¿Qué significa “excesiva”? ¿Con qué cantidad de este gas tóxico fueron fumigados los pasajeros del metro de Nueva York? Esta fue una nueva agresión contra los confiados ciudadanos, organizada siguiendo la táctica de la alarma de bandera falsa.
La historia de las agresiones graves perpetradas por el gobierno y el ejercito contra los ciudadanos abarca no solo décadas, sino varios siglos. Este artículo recoge buena parte de lo que ha sido descubierto por investigadores y periodistas independientes y valientes y por otras personas interesadas en estos ataques ilegales y horribles contra todos nosotros. 
LA GEOINGENIERÍA: LA MODIFICACIÓN DEL CLIMA MUNDIAL 
Los seres humanos llevamos mucho tiempo manipulando el clima atmosférico. Los fabricantes de lluvia existen desde la Antigüedad. Sin embargo, lo que ha ocurrido es que, esta vez, ha habido un plan secreto y premeditado para perjudicarnos a nivel mundial cambiando de manera encubierta los fenómenos meteorológicos de la naturaleza y sometiéndonos a todos nosotros a daños graves y constantes. Estos cambios atroces fueron creados por las élites (también conocidas como la cábala, los illuminati, el nuevo orden mundial o los millonarios infiltrados en el gobierno, los que verdaderamente mandan) para controlar en secreto las actividades financieras mundiales, la agricultura y la producción de alimentos (y esto incluye productos dañinos como los aditivos alimentarios tóxicos, las sustancias químicas venenosas, los pesticidas y los organismos transgénicos), la salud (en realidad la falta de salud, que se debe a las múltiples agresiones a las que nos someten) y un sistema educativo controlado y estrechamente vinculado a la desinformación gubernamental y mediática. Existe abundante documentación sobre todo esto. Esta situación nos afecta a todos y cada uno de nosotros en todos los aspectos de nuestras vidas. 
En 1996, la Fuerza Aérea de los Estados Unidos hizo público un documento titulado Owning the weather in 2025” (“El dominio del tiempo atmosférico en 2025”). El hecho de que una organización cualquiera pueda pensar que es capaz de “dominar” las fuerzas de la madre naturaleza, de las cuales en realidad se sabe muy poco, asombra por el orgullo y por la total malevolencia que demuestra. Cuando un país controla el tiempo atmosférico, puede manipularlo para provocar sequías extremas (como las que ha habido recientemente por todo el sur de California), huracanes, inundaciones, tornados (como el provocado por el HAARP en Oklahoma) y otros tipos de fenómenos meteorológicos extremos y caóticos que la mayoría de la gente ni se imagina que no son naturales. He aquí un reportaje emitido recientemente por la televisión sobre los impresionantes cambios que afectan a nuestros fenómenos meteorológicos: 
The Methodic Demise of Natural Earth” (“La desaparición sistemática del medio natural”), del Dr. R. Michael Castle, es una lectura imprescindible para comprender cómo la modificación del tiempo atmosférico ha destruido nuestro modo de vida. La versión actualizada fue escrita en 2009.
Las patentes sobre la modificación del clima atmosférico también han sido objeto de una investigación exhaustiva. GeoengineeringWatch.org ha publicado una amplia lista procedente de la Oficina de patentes y marcas de EE.UU. (US Patent and Trademark Office): http://www.geoengineeringwatch.org/an-extensive-list-of-patents/#more-3828
A lo largo de la última década, la investigación y la documentación no han sido exclusivas de Norteamérica. Wayne Hall ha sido clave para transmitir esta información desde Grecia a la Unión Europea. Aquí tenemos una puesta al día procedente de Aegina, Grecia, entre el periodista y antiguo europarlamentario Giulietto Chiesa y el vicealcalde de Aegina, Nektarios Koukoulis, sobre el asunto de la fumigación de aerosoles por medio de aviones y el cómplice sistema político de la Unión Europea: 
En Bélgica, el exalcalde Peter Vereecke fue incansable a la hora de organizar en 2010 la primera conferencia internacional sobre los chemtrails o estelas químicas en Gante, Bélgica: http://www.slideshare.net/LovingTruth/chemtrails-10-0529-ghent-2
Amy Worthington también ha escrito un importante artículo de investigación: Chemtrails and Terror in the Age of Nuclear War”(“Los chemtrails y el terror en la era de la guerra nuclear”). El artículo, destinado a quienes no saben nada sobre este tema, explica que los chemtrails forman parte de una agenda destructiva más amplia que incluye el HAARP (High Frequency Active Auroral Research Program o Programa de investigación de aurora activa de alta frecuencia), una serie de 26 formaciones de antenas localizadas en distintos puntos del planeta que pueden perforar agujeros en nuestra ionosfera. Worthington llama a estos programas “death technologies” (“tecnologías de la muerte”). Se trata de una información vital para nosotros que los medios de comunicación de masas controlados por las grandes compañías nos ocultan.
Además, varios meteorólogos han tenido el valor de informar sobre las fumigaciones. Kevin Martin fue uno de los primeros en crear una página web dedicada exclusivamente a ofrecer documentación sobre los aerosoles. Esta web seguía la pista de las fumigaciones por todo el mundo y era actualizada a diario, pero fue cerrada y actualmente se desconoce el paradero de su autor. 
Aunque no es un meteorólogo, “Dutch Since” es un entendido en la materia y está bien informado. Poseedor de una amplia experiencia, ha seguido la pista de anomalías climáticas en las que nadie más se fijaba. Sus excepcionales informes contienen datos bastante precisos. Durante un tiempo también le cerraron su página web. La nueva es la siguiente: http://sincedutch.wordpress.com
El meteorólogo Scott Stevens era el hombre del tiempo en la cadena ABC, pero fue despedido por hacer mención de los chemtrails. El año pasado dio una conferencia en el primer congreso nacional sobre las estelas químicas que tuvo lugar en Los Ángeles. He aquí las pruebas documentadas que aportó en agosto de 2012 para demostrar cómo nuestro clima está siendo manipulado adrede a través de esta tecnología silenciosa: 
Por último, estos programas clandestinos de guerra meteorológica también incluyen actualmente nuevas explosiones aéreas de aerosoles. Se trata de un nuevo sistema de dispersión de sustancias dañinas ocultas pero masivas, conocido como chembombs o bombas químicas. Estas fueron descritas el año pasado por Bruce Douglas en el congreso sobre los chemtrails que se celebró en Los Ángeles. Como él dijo entonces, “el plan del juego ha cambiado”. Douglas explicó que barcos militares estacionados en los océanos lanzaban estas bombas letales para que explotaran en nuestro aire

(Traducción al español de un artículo escrito por la doctora Ilya Sandra Perlingieri y cuya versión original en inglés se puede leer en este enlace.)
(Fuente: https://resistenciafrentealaviolencia.wordpress.com/)




1 comentario:

  1. Podemos ser todo lo hipócritas que queramos, en la respuesta de conciencia que asignemos a estos hechos anti- humanos...pero...sabiendo esto...sobre todo aquellos que tienen poder económico e incluso político y militar,,,
    ¡¿Podemos mirar a los ojos a nuestros niños!? ...¡sin sentir verguenza de la basura que somos permitiendo a degenerados que tienen el mismo grueso de piel que nosotros, hacer y deshacer con la salud e integridad de la humanidad y el ecosistema?! ¡Por qué siempre los que tenemos la conciencia necesaria para comprender la gravedad del artero ataque de estas escorias humanas, siempre somos los que estamos lejos de los agresores? ...mientras los que los tienen al lado no hacen nada? idiotas cobardes! lo que hay que hacer es desangrar a esas basuras humanas con la misma frialdad que nos atacan...POR NUESTROS HIJOS!

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