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18.4.20

Si nos gusta vivir con alegría y fe en la Vida, ningún virus puede afectarnos

  © LIBEREMONOS (En cuerpo y alma)                           

Hay interés en eliminar a los ancianos y a la gente enferma crónica, en definitiva la que no sirve para el sistema y que le cuesta dinero de "mantener". Y así se puede comprobar sólo que nos fijemos un poco.

Se están utilizando muertos habituales -en períodos de frío entre los grupos de edad más avanzada- para hacerlos pasar como el resultado de una pandemia prefabricada.

Ahora todo el mundo que se muere lo es debido al jodido virus. Se ve que todas las demás causas han desaparecido. ¿Por qué no se ha hecho ninguna autopsia a nadie?

Nos quieren hacer pasar gato por liebre e ir hinchando las cifras para acabar de asustarnos de manera perversa. ¡Y aun aplaudimos el que nos engañen!

Yo tengo 72 años y, siguiendo la lógica de la situación, formo parte de la población en riesgo. Pero yo estoy sanísimo y desmiento a los pregoneros oficiales de que todos estamos expuestos a la infección.


Si nos gusta vivir y nos nutrimos de alegría y fe en la Vida, ningún virus puede afectarnos. Nada ni nadie puede tumbarnos.

Me hago cruces de que no haya en ninguna parte revueltas ante este ataque con premeditación y alevosía para derrumbarnos tanto psíquica como económicamente y, lo que es más grave, enfrentarnos los unos contra los otros.

Quieren amargarnos y deprimirnos hasta el fondo y nos lo estamos dejando hacer. Nos lo han quitado todo y más que nos quitarán. Lo hacen de manera gradual para que no nos demos cuenta y lo vayamos dando por algo natural.

Propongo romper de una vez este encierro forzoso, innecesario y pernicioso para la salud física y mental de tanta gente que, si algo se les puede reprochar es su buena fe, su ingenuidad y su miedo irracional, dando credibilidad a esta manipulación gigantesca y criminal.

PLANTEMOS CARA a un sistema que no quiere más que aniquilarnos y hacernos perder las ganas de vivir.

SALGAMOS A LA CALLE todos en tromba y dejémonos de guantes, mascarillas y gilipolleces.

RECUPEREMOS NUESTRA LIBERTAD que si entraña algún riesgo es el de ser felices... o nos queremos quedar encerrados y angustiados de forma permanente?

Quiero volver a bailar y disfrutar de la vida!
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Joan Martí  – elcamidelavida@gmail.com

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