© EL
GRAN DILEMA: Demostrar nuestro poder
Tenemos la capacidad y el poder de actuar de manera
efectiva sobre la realidad actual, pero, ¿Qué acción emprender? ¿Qué norma
aplicar? En definitiva: ¿Qué hacer?
La dificultad de enfrentar temas globales, nos hace
reflexionar sobre la posibilidad de poder hacerlo aunque, según está escrito,
el ser humano tiene una capacidad creadora total.
Hay un haz de "leyes
universales" que inciden en esta línea. Está claro que hemos de creer
en ello, pero todos hemos tenido algún flash en la vida.
La intención, el libre albedrío, lo de pide y se te
dará, la fe que mueve montañas, creas lo que crees, pensamiento-palabra-obra,
los decretos al universo...
De entrada todo esto puede parecer metafísico, pero quien
ha experimentado aunque sea una brizna de ello puede dar fe de que funciona porque
son herramientas que todos tenemos al alcance.
Cierto que se necesitan una predisposición y una
convicción, pero no más que en cualquier otra empresa mundana que quieras
llevar a buen puerto, tal vez con la única diferencia de que el trabajo es más
de tipo espiritual, enfocado al interior de uno mismo.
Para crear lo que sea, primero se ha de tener una idea,
un anhelo -un pensamiento- hacia el que prestarle una atención especial y a fuer
de irnos recreando en él, vamos haciéndolo realidad, desarrollándolo en sus
aspectos concretos.
Cuando concentramos toda nuestra energía en algún tema, éste
va tomando cuerpo y nos lo hacemos nuestro y así vamos "materializándolo"
hasta que surge ante nosotros.
Los anhelos y los deseos, bien formulados y aderezados
con una fuerte convicción, acaban haciéndose presentes si los invocamos desde
el corazón. El Universo es infalible:
todo lo que le pides te lo da (incluso lo que no te gusta o lo que temes,
precisamente porque te concentras en ello)
Volvamos al principio de este escrito. Sabiendo que
tenemos la capacidad de intervenir en lo que pasa ahora en el mundo, ¿por dónde
empezar?
1. ¿Desarmar a los elementos malvados que provocan la
actual situación?
2. ¿Disolver el velo que oculta a la mayoría lo que pasa
verdaderamente?
3. ¿Presentar un mensaje contundente y esclarecedor por
los medios convencionales?
4. ¿Encabezar una revuelta popular para recuperar la
dignidad humana?
5. ¿Proponer un cambio de vida, alejada del consumismo y
la tecnología?
6. ¿Convocar asambleas populares para dilucidar la
voluntad de la gente?
7. ¿Promover encuentros públicos para abrazarnos unos a
otros?
¿Parece algo inasequible plantearse estas posibilidades
de actuación? Por lo menos, como ejercicio de clarificación, vale la pena
contemplarlas, porque creo que es una de las carencias que tenemos: No sabemos lo qué queremos ni cómo lo
queremos! O quizás lo sabemos pero no cómo lo queremos (qué precio estamos
dispuestos a pagar).
Por lo tanto empecemos por hacer una verdadera indagación
y a la que tengamos concretada nuestra aspiración, podremos poner en marcha el
"proceso" de hacerla realidad.
Claridad y convicción son básicas para encarar la
situación sirviéndose de las Leyes
Universales que nos lo permiten hacer.
En marcha pues?
¿CÓMO LE PIDES AL UNIVERSO?
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Joan Martí - elcamidelavida@gmail.com
16 de junio de 2020
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