ESCASEZ DE ALIMENTOS EN SEIS MESES
LOS GLOBALISTAS NOS CUENTAN LO QUE PASARÁ
A mediados de 2007, el Banco de Pagos Internacional (el
banco central de los bancos centrales) publicó
una declaración en la que predecía una inminente "Gran
Depresión" causada por una implosión del mercado de crédito. Ese mismo
año, el Fondo MonetarioPREV Internacional también
advirtió de los "problemas de las hipotecas de alto riesgo",
que conducirían a una crisis económica más amplia. Empecé a escribir análisis económicos
alternativos un año antes, en 2006, e inmediatamente me pareció extraño que
estas enormes instituciones globalistas con considerable influencia sobre el
mundo financiero empezaran de repente a parecerse a los que estamos en el
movimiento por la libertad.
Esto fue hace 16 años, así que muchos de los que están leyendo esto puede que ni siquiera lo recuerden, pero en 2007, los medios alternativos ya llevaban tiempo advirtiendo contra la inminencia de una caída deflacionaria en los mercados estadounidenses y en la vivienda. Y, como era de esperar, los principales medios de comunicación seguían negando todas nuestras preocupaciones por considerarlos "catastrofismo" y "teoría de la conspiración". Menos de un año después, las primeras empresas inundadas de derivados empezaron a anunciar que estaban al borde de la quiebra y que todo se vino abajo.
¿La respuesta de los medios de comunicación? Hicieron dos
declaraciones muy extrañas simultáneamente: "Nadie pudo haberlo visto
venir" y "Lo vimos venir desde un kilómetro de distancia". Los
periodistas de los medios dominantes se apresuraron a posicionarse
como los adivinos por excelencia, como si siempre hubieran dicho que el
choque era inminente, cuando sólo un puñado de personas lo había anunciado y
ninguna de ellas estaba en los medios de comunicación. También se ignoró el
hecho de que el BPI y el FMI habían publicado sus propias
"predicciones" mucho antes del crach; los medios de comunicación
hicieron como si no existieran.
En los medios de comunicación alternativos, observamos las
declaraciones y admisiones de los globalistas con MUCHA atención, porque su
trabajo no consiste en analizar las amenazas, sino en sintetizarlas. En otras
palabras, si algo va muy mal en el mundo en el plano económico, los banqueros centrales
y las élites financieras que aspiran a una autoridad económica única y
centralizada para el mundo son SIEMPRE acusados del origen de este desastre.
Por alguna razón, les gusta decirnos lo que van a hacer
antes de hacerlo.
La idea de que los globalistas están creando artificialmente
eventos de colapso económico será, por supuesto, criticada como una
"teoría de la conspiración", pero es un HECHO. Para obtener más
información sobre la realidad del sabotaje financiero deliberado de los globalistas
y la ideología del "orden a partir del caos", por favor lea mis
artículos "Fed
One Meeting Away From Creating A Doomsday Sinkhole" y "¿What
Is The Great Reset And What Do The Globalists Actually Want?
La agenda
del Gran Reinicio propuesta por el jefe del FEM, Klaus Schwab, es sólo
un ejemplo de las muchas discusiones ocultas a plena vista por los globalistas
sobre sus planes para utilizar el declive económico y social como una
"oportunidad" para establecer rápidamente un nuevo sistema mundial
único basado en el socialismo y la tecnocracia.
El principal problema para discernir los planes de los
globalistas no es descubrir las agendas secretas, sino que suelen hablar
abiertamente de ellas si se sabe dónde buscar. No, el problema está en separar
las confesiones de la desinformación, las mentiras de la verdad. Para ello, es
necesario cotejar los libros blancos y las declaraciones de los globalistas con
los hechos y las pruebas disponibles en el mundo real. Veamos en detalle el
problema de la escasez de alimentos...
Escasez de alimentos en seis meses
Hace una semana, hubo un torrente de comunicados de prensa
de instituciones mundiales que mencionaban exactamente la misma preocupación:
la escasez de alimentos en los próximos 3 a 6 meses. Estas declaraciones se
corresponden muy estrechamente con mis propias estimaciones, ya que he estado
advirtiendo regularmente de los peligros inminentes de que la inflación
provoque un racionamiento de alimentos y la interrupción de la cadena de
suministro.
El FMI, el BIS, el Banco Mundial, la ONU, la Fundación
Rockefeller, el Foro Económico Mundial, el Bank of America e incluso el mismo
Biden predicen una gran crisis alimentaria a corto plazo, y no es casualidad
que las políticas de estas mismas instituciones y las acciones de los políticos
títeres que trabajan con ellas están causando la crisis que ahora
predicen. Es decir, es fácil predecir un desastre cuando lo has creado.
La afirmación es que la invasión rusa de Ucrania es la causa
principal, pero esto es una distracción del problema real. Sí, las
sanciones contra Rusia eventualmente conducirán a un menor suministro de
alimentos, pero los globalistas y los medios están ignorando deliberadamente la
amenaza mayor, que es la devaluación de la moneda y la inflación de precios
creada por los bancos centrales que inyectan decenas de billones de dólares en
paquetes de estímulo para sostener a las empresas corporativas “demasiado
grandes para quebrar”.
Solo en 2020, la Reserva Federal creó más de 6 billones de
dólares de la nada y los inyectó en la economía mediante programas de
asistencia social covid. Añada eso a los muchos billones de dólares
que la Fed ha impreso desde la caída del crédito en 2008: ha sido una fiesta de
destrucción de dólares sin parar y ahora el público está comenzando a sentir
las consecuencias. Por suerte para los banqueros centrales que la
pandemia covid golpeó y que Rusia invadió Ucrania, porque ahora pueden desviar
toda la culpa de la calamidad inflacionaria que han creado hacia la pandemia y
hacia Putin.
La inflación estaba en su punto más alto de los últimos 40
años en Estados Unidos mucho antes de que Rusia invadiera Ucrania, pero
considere las ramificaciones de esta guerra y cómo está afectando al suministro
de alimentos.
La invasión rusa está perturbando sin duda la producción
ucraniana de cereales, que representa alrededor del 11% del total del mercado
mundial de trigo. Rusia también tiene una cuota del 17% y juntos estos dos
países abastecen a gran parte del tercer mundo y de Europa con el 30% de las
exportaciones de trigo y cebada, el 19% de las exportaciones de maíz, el 23% de
las exportaciones de canola y el 78% de las exportaciones de girasol.
Sin embargo, las sanciones contra Rusia constituyen
un problema que va mucho más allá de Ucrania, ya que Rusia también
produce alrededor del 20% del suministro mundial de amoníaco y el 20% del
suministro mundial de potasa. Son ingredientes clave de los fertilizantes
utilizados en la agricultura industrial a gran escala. Los agricultores estiman
que la subida general de precios en los mercados de alimentos será de alrededor
del 10%, pero creo que estas cifras son muy prudentes. Ya estoy viendo subidas
de precios globales de al menos un 20% en comparación con hace seis meses, y
espero ver una nueva subida de precios del 30% antes de que acabe el año. En
otras palabras, esperamos aumentos medios del 50% en 2022.
Los datos oficiales del gobierno sobre la inflación y el IPC
no son fiables. Duplique las cifras que dan y estarás mucho más cerca de la
verdad. La tasa de inflación utilizada por Shadowstats.com,
calculada con los métodos que en su día utilizó el gobierno de EE.UU. en la
década de 1980, antes de "corregir" sus modelos para ocultar los
datos, respalda mi posición hasta ahora.
Los expertos agrícolas estadounidenses esperan que China
llene el vacío donde desaparecen los suministros rusos, pero es un error hacer
esta suposición.
Algo extraño está ocurriendo en China
La represión china de las infecciones por covid ha
alcanzado unos niveles tan extraños que me veo obligado a plantear la siguiente
pregunta: ¿Sus medidas de confinamiento tienen que ver realmente con el covid,
o esconden algo más?
La tasa de mortalidad por covid en China es imposible de
calcular con exactitud porque nunca han publicado datos correctos que se puedan
confirmar. Sin embargo, en casi todo el mundo, la tasa media de letalidad de la
infección por covid es del 0,27%, lo que significa que más del 99,7% de las
personas del mundo no tienen que preocuparse por morir a causa del virus. Pero
en China, el PCC actúa como si se tratara de la peste negra. ¿Por qué?
Los cierres han provocado escasez de alimentos en todo el
país, con las cadenas de suministro sometidas a presión y las fábricas cerradas
en muchos casos. Pero de lo que los occidentales no oyen hablar mucho es del
hecho de que las exportaciones chinas se han congelado. Más
de 1 de cada CADA 5 buques portacontenedores EN EL MUNDO están
actualmente atascados en los puertos chinos debido al cierre de los mismos.
Esto es increíble.
¿Por qué iba a hacer esto China con un virus que todos
sabemos que no es peligroso para la gran mayoría de la gente? ¿Por qué
instituir el peor cierre del país hasta la fecha y hacer pasar hambre a su
propia población cuando la mayoría de los gobiernos occidentales han abandonado
ya su campaña de miedo a la pandemia y su programa de vacunación forzosa?
Yo sugeriría la posibilidad de que China ya esté
participando en una guerra económica de la que muchos estadounidenses y
europeos ni siquiera se dan cuenta. Puede tratarse de una prueba beta para un
cierre de las exportaciones a EE.UU. y Europa, o de un cierre progresivo que
pretende convertirse en permanente. El cuello de botella en el comercio también
puede ser un precursor de una invasión china de Taiwán.
De hecho, Taiwán depende más de la economía china y está
más estrechamente vinculada a ella de lo que muchos creen. China es el
mayor comprador de las exportaciones taiwanesas y éstas representan el 10% del
PIB de Taiwán. Cientos de miles de trabajadores y empresarios taiwaneses viajan
regularmente a China por motivos de trabajo, otro factor económico que ahora se
ve perjudicado por los cierres. Además, Taiwán tiene muchas empresas que operan
sus fábricas en China continental, todas las cuales podrían cerrar debido a los
cierres.
Lo único que digo es que si yo fuera China y estuviera
planeando invadir Taiwán en un futuro próximo, podría considerar la posibilidad
de utilizar el covid como tapadera para dañar primero su economía y perturbar
su modelo de exportación. Los comunistas ven a la población como una utilidad
que puede ser sacrificada si es necesario, y China está perfectamente dispuesta
a causar sufrimiento a corto plazo a su pueblo si eso significa ganancias a
largo plazo para el partido. Además, si tuviera que emprender en secreto una
guerra económica con Occidente, ¿qué mejor manera que bloquear el 20% de los
buques de carga del mundo e interrumpir las cadenas de suministro en nombre de
la protección del país contra una "pandemia"?
¿El resultado final? No cuente con China para satisfacer las
necesidades de exportación de ingredientes para fertilizantes ni de ningún otro
tipo, ya que las sanciones contra Rusia continúan.
Inflación, abastecimiento y control
No son sólo las organizaciones globalistas las que hablan de
la próxima escasez de alimentos; el director general de la empresa
internacional de alimentación Goya también
advirtió recientemente que estamos al borde de una crisis alimentaria.
Como ya he señalado en el pasado, la inflación lleva al control de precios por
parte del gobierno, el control de precios lleva a la falta de incentivos para
producir (beneficios), la falta de beneficios lleva a la pérdida de producción,
la pérdida de producción lleva a la escasez, y la escasez lleva al
racionamiento por parte del gobierno (control de las principales fuentes de
alimentos).
Como hemos visto con casi todos los regímenes autoritarios
de la historia moderna, el control del suministro de alimentos es esencial para
controlar a la población. Sólo es superado como preocupación estratégica por el
control de la energía (de la que pronto experimentaremos escasez cuando Europa
sancione el petróleo y el gas rusos y comience a absorber los suministros de
otros exportadores). El tema de los alimentos nos toca más de cerca, ya
que podemos ver inmediatamente los efectos en nuestros bolsillos y familias. No
hay nada peor para muchos padres que la perspectiva de que sus hijos pasen
hambre.
Los principales medios de comunicación vuelven a ignorar
cualquier posible amenaza económica y, más concretamente, niegan que la escasez
de alimentos sea algo de lo que preocuparse. Yo digo, ¿por qué escuchar a un
grupo de personas que siempre se equivocan en este tipo de eventos? Yo al menos
tomaría en serio a los globalistas cuando se trata de un colapso económico;
después de todo, son los que más se benefician de tales desastres y los que más
influencia tienen a la hora de desencadenar una crisis.
La preparación de hoy no cuesta nada mañana. La falta de
preparación hoy cuesta TODO mañana. Para cualquier persona con cerebro, la
elección es sencilla: prepararse para el fin de los alimentos asequibles y
fáciles de conseguir antes de que acabe el año.
Brandon Smith
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