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29.4.20

Los elitistas globales nunca dejan que una buena crisis ocurra sin ser aprovechada

CORONAVIRUS: Las "curas" peor que la enfermedad     

Esto se está extendiendo. Esto se está transformando. Se está haciendo viral. Estoy hablando del coronavirus? ¡No! Hablo acerca de teorías sobre el coronavirus.
      -       Es un virus natural. / ¡No, es una bio-arma artificial!
      -       Es menos mortal que la gripe de siempre. / ¡Es peor que la Gripe Española!
      -       Las cifras están siendo sub-reportadas. / ¡Los números están siendo inflados!
      -       Fue patentado en 2015! / No, realmente no lo fue.
      -       Fue soltado por casualidad. / Fue soltado a propósito. / ¡Ni siquiera existe!
Sí, hay tantas teorías sobre la enfermedad de coronavirus de 2019 (Covid-19) como gente hablando de ello. La realidad es que no sé la verdad sobre lo que es realmente este virus o de dónde vino, y usted tampoco.
Pero hay algo que sabemos realmente con seguridad sin tener en cuenta de dónde vino este virus o si realmente siquiera existe. Las exageraciones, el miedo, el pánico y el pandemónium que rodean a este (supuesto) brote van a ser mucho peores que lo que lo podría llegar a ser la enfermedad, porque, como he estado vociferando durante más de una década hasta ahora, un ataque de bio-arma (real o artificial, de falsa bandera u otra cosa) es la tapadera perfecta para un montón de quehaceres de agenda de la lista de metas a cumplir por el globalismo. Y mientras más la población entra en pánico, más ella se pone en las manos de los globalistas.

Hay cinco elementos de la lista de deseos de los Poderes Fácticos que están siendo entregados en bandeja de plata mientras la gente se escabulle rápidamente con pánico por causa del coronavirus.
1) Vigilancia y Control de la Población Sin Precedentes
     Como ya sabrán, China es desde muchos puntos de vista el modelo para el tecnocrático Brave New World del siglo XXI. Gran cantidad de crédito social y redes de circuito cerrado de televisión con reconocimiento facial, y la Internet controlada por el gobierno, son sólo los ejemplos más obvios de cómo los gobiernos buscarán vigilar y controlar a sus poblaciones en el futuro. Entonces no debería ser sorprendente que China, como el epicentro de este nuevo brote de coronavirus, esté a la cabeza de nuevos y hasta ahora no soñados modos de mantener alineada a su población durante la crisis.
     La primera cosa a notar es la enorme escala de lo que el gobierno chino está intentando aquí. La cuarentena impuesta en Wuhan el mes pasado (Enero de 2020), cercando una ciudad de 11 millones de personas, era ya la cuarentena más grande en la historia humana. Pero cuando aquella cuarentena se amplió para incluir la provincia entera de Hubei —una población de 57 millones de personas— el alcance del confinamiento se hizo casi inimaginable. ¿Cómo puede posiblemente ser mantenida tal cuarentena?
     Bien, como todos hemos visto, aquello puede ser hecho por la buena y antigua fuerza bruta. Cuando esté en la duda, ¡sólo cierre la puerta del enfermo para que no pueda abandonar su cuarto! Pero para manejar realmente a millones de personas, usted necesita ayuda tecnológica. Y de ese modo el gobierno chino ha estado desplegando cada instrumento que hay en su arsenal para supervisar y mantener restricciones sobre los ciudadanos y sus movimientos: ¿Drones volantes para acosar a cualquiera que ande por ahí sin una mascarilla? Ya están. ¿Un sistema de video-vigilancia a escala nacional llamado Skynet para ayudar a descubrir a evasores de cuarentena? Ya está. ¿Una clasificación con códigos de colores en un pago de una aplicación de smartphone para identificar a la gente como de bajo o alto riesgo de portar el virus en base a sus pagos e historial de viajes? Ya está.
     Si usted puede pensar en un modo escalofriante e invasivo de rastrear y controlar a la población, puede apostar su último dólar a que el gobierno chino ha pensado ya en ello (y probablemente ya lo está usando).
     Pero ésta es la verdadera pregunta: Cuando todo esto se acabe, ¿piensa usted que el gobierno simplemente dejará de lado esas tecnologías y sistemas, o cree usted que una vez que ese nivel de control se haya hecho normal los autoritarios del Partido Comunista Chino seguirán usándolo?
     Y aquí está la pregunta aún más verdadera: ¿piensa usted que existe algún gobierno en el mundo que no usaría esa tecnología sobre su propia población de ser dada una excusa conveniente?
     Las respuestas a estas preguntas son obvias, pero sólo mire el condicionamiento de prisionero que ha estado ocurriendo en los aeropuertos durante las últimas dos décadas. Incluso gente como yo mismo que creció pre-11-S puede creer apenas que hubo un tiempo donde usted podía subirse a un avión con poco más que pasar por un detector de metales. ¿Qué? ¿Usted quiere pasar una botella con agua por entre la seguridad? ¿Qué está usted loco? En sólo dos décadas, la experiencia entera de los viajes aéreos ha sido completamente transformada, y ninguna declaración de victoria en la así llamada "Guerra contra el Terrorismo" traerá de vuelta alguna vez las viejas prácticas de chequeos de seguridad. Para el estadounidense promedio, la Transportation Security Administration (TSA) es ahora sólo un hecho de la vida.
     Y para aquellos que vivan mucho tiempo bajo un régimen de cuarentena forzosa, la completa vigilancia del gobierno de cada movimiento de los ciudadanos, junto con las compras y las interacciones, será sólo un hecho de la vida. Esos instrumentos de control están ahí para permanecer, y mientras más duren esas cuarentenas y mayores sean las áreas afectadas, más continuará el condicionamiento del público para que acepte esa situación.
2) Un Cheque en Blanco para la Gran Industria Farmacéutica y la OMS
     Cuando un detective está buscando solucionar un crimen, es importante preguntar quién se beneficia con ello. Aunque pueda ser circunstancial, establecer quién se beneficia de un crimen al menos lo pone a usted en la pista de algunos sospechosos.
     En este caso, sin embargo, la pregunta de quién se beneficia tiene una respuesta simple: la OMS se beneficia, por supuesto, la Organización Mundial de la Salud. Como el organismo de Naciones Unidas encargado de la dirección de la salud internacional y de la conducción de la respuesta a las preocupaciones de salud globales, la OMS siempre crece en poder como consecuencia de cada crisis.
     Durante la no-crisis de la gripe porcina y la no-crisis del virus Ébola y la no-crisis del Zika la OMS fue conducida por la directora general Margaret Chan. Fue bajo la supervisión de Chan, recuerde, que la OMS declaró el brote de gripe porcina de 2009 como una "pandemia global", una movida que automáticamente provocó compras por miles de millones de dólares en vacunas por parte de varios gobiernos. Ése fue una descarada cogida de dinero en efectivo, por supuesto, e incluso el Consejo de Europa se vio obligado a darse cuenta de que los miembros del consejo de la OMS que hicieron la declaración de pandemia también se sentaban en los consejos de los fabricantes de vacunas que estaban para beneficiarse de aquella decisión.
     Con el brote del Covid-19, también, la OMS está jugando un juego con la declaración de pandemia, sólo que esta vez su motivación es precisamente lo contrario. En 2017 el Banco Mundial emitió bonos por 425.000 millones de dólares en apoyo de su Pandemic Emergency Financing Facility  (Mecanismo de Financiamiento de Emergencia Pandémica). Los inversionistas en aquella emisión de bonos lo perderán todo si una pandemia global es declarada antes de Julio... una razón clave, sugieren algunos, de por qué la OMS rechaza llamar al coronavirus una pandemia a pesar de que muy claramente aquél cumple con los criterios.
     Entonces, ¿quién está encabezando la OMS esta vez? Bien, ya no es Margaret Chan. Ella renunció en 2017 y fue reemplazada por Tedros Adhanom Ghebreyesus, un político y académico etíope que, señala William Engdahl, es el primer director general de la OMS que ni siquiera es médico. En vez de eso, después de obtener su grado en biología en la Universidad de Asmara en Eritrea y servir en una posición menor en el Ministerio de Salud bajo la dictadura marxista de Mengistu, él
     "...después llegó a convertirse en el ministro de salud entre 2005 y 2012 bajo el Primer Ministro Meles Zenawi. Allí él conoció al ex-Presidente Bill Clinton y comenzó una colaboración cercana con Clinton y con la Clinton Foundation y su Iniciativa Clinton para el VIH/SIDA (CHAI). Él también desarrolló una relación cercana con la Fundación Bill y Melinda Gates. Como ministro de salud, Tedros también presidiría el Fondo Global para la Lucha contra el SIDA, la Tuberculosis y la Malaria que fue co-fundado por la Fundación Gates. El Fondo Global ha estado lleno de escándalos de corrupción y fraude".
     Ah, ¿usted quiere decir la Fundación Gates y su GAVI Alliance para la vacunación que son los mayores donantes de la OMS, la Fundación Gates que ayudó a organizar el "ejercicio pandémico de alto nivel" Event 201 en Nueva York en Octubre pasado que preparó el escenario del coronavirus entero por el que actualmente estamos pasando? Correcto.
     ¿Y cómo la OMS va a salvar el día? ¡Con fármacos de la Gran Industria Farmacéutica, naturalmente! Los gobiernos ya están haciendo fila para prometer decenas de millones de dólares para financiar el esfuerzo para desarrollar una vacuna contra el coronavirus. Y ésa es sólo la financiación para desarrollar la vacuna. Hay muchos miles de millones más esperando a los fabricantes de la Gran Industria Farmacéutica que puedan entregar la primera vacuna al mercado.
     Sí, el coronavirus va a ser un gran día de paga para algunas personas ricas y bien conectadas en la mafia médica internacional. Pero no se preocupe, los políticos van a entrar en la diversión, también...
3) Una Excusa para Poner en Práctica la Ley Marcial Médica
     Hace una década, en medio de las exageraciones por la gripe porcina, publiqué un informe acerca de la ley marcial médica. Entonces presenté las diversas formas en que los gobiernos del mundo (incluyendo, por supuesto, al gobierno estadounidense) han estado aprobando silenciosamente la legislación que les permitirá poner en práctica la ley marcial en caso de una pandemia global. Eso permitiría que ellos pusieran en cuarentena y encarcelaran a ciudadanos sospechosos de la infección, y permitiría que el gobierno administrara cualquier medicación (incluso vacunaciones) que considerara necesaria para frenar la difusión de la infección.
     En Estados Unidos específicamente, esa legislación tomó la forma de la Ley Estatal Modelo de Poderes de Salud de Emergencia (MSEHPA), una pieza de legislación que fue redactada por el Centro para la Creación de Enfermedades (CDC, Centro para el Control de Enfermedades). Dicha ley concede al gobierno el poder de poner en cuarentena, forzar la vacunación, y movilizar a los militares para ayudar a implementar procedimientos de emergencia cuando se consideren necesarios para contener el brote. La ley está diseñada para ser despachada en cada legislatura estatal de modo que los Estados puedan armonizar sus planes de emergencia en caso de pandemia, esencialmente creando un sistema federal que permite la ley marcial médica. Como la ACLU (American Civil Liberties Union) hace notar,
     "Esa Ley permite a un gobernador declarar un estado de emergencia de manera unilateral y sin supervisión judicial, deja de proporcionar modernos procedimientos debidos para la cuarentena, concede otros poderes extraordinarios, carece de la adecuada compensación por la incautación de bienes, y no contiene ningún contrapeso al poder de ordenar el tratamiento forzado y la vacunación". 
     A pesar de todo, en la cuenta final dicha ley ha sido la base para 133 piezas de legislación en 33 Estados diferentes.
     Y, como era de esperarse, los ciudadanos del mundo desarrollado y occidental que pensaron que la ley marcial era sólo para las repúblicas bananeras y los exóticos países del Este, están a punto de probar esta amarga medicina como la otra cara de las exageraciones del coronavirus.
     Australia acaba de activar su plan de emergencia pandémica a pesar de no tener ni un caso reportado de transmisión de humano a humano del Covid-19. El plan concede al gobierno el poder de cancelar los eventos públicos, obligar a la gente a trabajar desde casa, cerrar centros de cuidado de niños y por otra parte imponer mandatos y restricciones sobre las vidas diarias de sus ciudadanos cuando lo considere adecuado.
     Para no ser aventajado, el Consejo Federal Suizo acaba de declarar una "situación especial" que permite que el consejo publique ordenanzas policiales de emergencia sin una base en la ley federal. Algunos de los poderes explícitamente asumidos por el consejo incluyen el poder de obligar vacunaciones, ordenar cuarentenas y prohibir eventos o cerrar instituciones.
     Ahora Gran Bretaña, Estados Unidos y otros países le están sacudiendo el polvo a sus propios planes de emergencia y se disponen a entrar en la bonanza de la ley marcial.
     Por supuesto, ésta no es sólo la respuesta absolutamente previsible a las actuales exageraciones del brote, sino que era la respuesta predicha. Así es que, como ya señalé, el ejercicio de alto nivel denominado Event 201 que fue realizado en Octubre pasado y que simuló una pandemia de coronavirus global dio ocasión a una extensa discusión sobre la necesidad de poner en práctica la ley marcial médica a fin de poner al virus bajo control.
     Así vimos a Stephen Redd del CDC opinando durante el ejercicio que "los gobiernos tienen que estar dispuestos a hacer cosas que están fuera de su perspectiva histórica [sic]... Esto es realmente una preparación para la guerra con la que tenemos que estar conectados".
     Del mismo modo, Brad Connett, del fabricante de suministros médicos Henry Schein Inc., declaró que "puede suceder rápidamente. Un plan tipo ley marcial ellos pueden no decir eso exactamente, pero un plan de tipo ley marcial puede entrar en efecto y estimular el cambio muy rápidamente".
     Ciertamente puede. ¿Y qué espacio cree usted que los gobiernos que implementan la ley marcial van a dejar para el disenso con respecto al tema? Por esa razón, ninguno, por supuesto. ¿Pero cómo van ellos a detener la difusión de información en esta época de medios sociales siempre conectados todo el día y toda la semana? Eso nos conduce a nuestro siguiente elemento en la agenda del Nuevo Orden Mundial.
4) Una Excusa para Tomar Duras Medidas contra la Internet
     A fines del año pasado predije que 2020 iba a ser el final de la Internet como la hemos conocido. Cuando formulé esa predicción pesaban fuertemente en mi mente el circo electoral estadounidense de 2020 y la inevitable ola de censura que eso provocaría. Como son las cosas, es completamente posible que el coronavirus sea la excusa conveniente para que los gobiernos muestren sus músculos de censura en la Internet.
    El sitio Zero Hedge ya ha tenido su cuenta de Twitter suspendida por publicar los detalles de un científico chino particular que trabaja en el laboratorio biológico de Wuhan, que algunos sospechan que fue el origen del brote. Eso fue hecho en nombre de la política de Twitter sobre "abuso y acoso", pero dado que el sitio web no hizo nada más que publicar información de contacto ya públicamente disponible con respecto al científico, parece más probable que eso sea parte de una campaña para controlar la narrativa del coronavirus desde un comienzo.
     Considerando el actual estado de la censura en línea, ¿puede haber alguna duda de que los gobiernos del mundo acudirán sin pensar a la excusa para eliminar a las voces discrepantes en la Internet? A medida que la información alternativa sobre el virus, sus orígenes, y las vacunas que están destinadas a "curarlo" inunda la red, será emprendida una campaña de propaganda distinta a cualquiera que hayamos visto antes para retratar a los proporcionadores de esa información como una amenaza para el orden público. Ellos serán en consecuencia purgados de la Internet, con la aprobación (sin duda) de una gran proporción de la población. Y con aquel precedente establecido, sólo será una cuestión de tiempo antes de que cualquier información que desafíe al poder dirigente sea considerada como una "amenaza para el orden público" y borrada de Internet.
     Para que no haya ninguna duda de que la purga online es un aspecto del escenario pandémico que es particularmente importante para los Poderes Fácticos, debiera ser notado que el Event 201 se preocupó extensamente de cómo "detener la difusión de desinformación". La respuesta de ellos: cierre y censura de la Internet, ¡por supuesto!
5) Precipitación de la Crisis Económica
     Dado que yo me gano la vida online, la perspectiva de un cierre de Internet y medidas enérgicas de censura es preocupante para mí. Pero antes de que usted se aflija demasiado por la grave situación de este pobre difusor, pongamos esta crisis en perspectiva: Suponiendo que el virus realmente se vuelva pandémico, es muy probable que ésta será la mayor interrupción económica de nuestra vida.
     Este es el punto donde yo presentaría algunos hechos para sostener una declaración tan osada, pero dado que recién vimos la peor semana en los mercados desde la crisis financiera, incluyendo los peores dos días de caída en la historia del índice Dow Jones, dudo que sea realmente necesario entrar en detalles.
     A medida que se expanden las cuarentenas de masas, los eventos públicos son cancelados, los negocios son cerrados, y la actividad económica en general está frenando en seco, no se requiere ser un genio para deducir que estamos ciertos a llegar a una crisis económica global de proporciones casi impensables. Pero las verdaderas interrupciones van a comenzar mucho antes de que lleguemos a aquel punto.
     Dado que las cuarentenas masivas han comenzado en China, también conocida como el eslabón más importante en la cadena global de suministro, vamos a ver en el futuro muy próximo dificultades significativas para muchos fabricantes que producen bienes de consumo básicos: smartphones, automóviles, e incluso, como una perversa ironía, suministros médicos. Gran parte de la economía global que depende de la fabricación china está experimentando ya cierres y carencias. Y éste es sólo el primer tajo de lo que promete ser una hendidura gigantesca.
     Aquí está la peor parte: Esas interrupciones ya son básicamente imposibles de evitar. Incluso si cada uno en el planeta fuera de repente curado de su enfermedad de la noche a la mañana y todas las cuarentenas fueran levantadas, los efectos de estas últimas semanas de confinamientos y cierres todavía seguirían recorriendo su camino a través de la economía global durante meses. Pero cuando el miedo y las exageraciones se difunden de continente en continente y las interrupciones masivas se expanden, esos efectos empeorarán cada vez más.
     Yo ampliaría este punto, pero tengo la sensación de que esto va a convertirse en un tema dominante y recurrente de revisión en este sitio web en el futuro. Déjeme sólo decir esto por el momento: sin tener en cuenta si el coronavirus es natural o artificial o incluso si existe en absoluto, los efectos económicos de este acontecimiento van a ser muy reales y muy profundos. Considerando que he estado documentando el esquema de Ponzi que ha sido la moderna economía global durante más de una década hasta ahora, a menudo me preguntan cuándo colapsará la estafa y cuándo golpeará la crisis financiera global predicha hace mucho tiempo. Bien, es muy probable que la crisis haya golpeado oficialmente ahora y las décadas de locura fantasiosa de dinero de tasa de interés negativo que ha tapado nuestra sombría realidad económica estén a punto de caer y estrellarse abajo de repente.
Conclusión:
El Pánico por el Coronavirus Es un Impulso Gigantesco para la Agenda Globalista
     Recientemente escuché una sugerencia de que si esto resulta realmente en una pandemia global entonces esto retrasará la agenda globalista en décadas. Después de todo, un acontecimiento como éste seguramente nos enseñará a todos una dura lección acerca de autosuficiencia nacional y del peligro inherente de una cadena de suministro global sobreextendida, ¿verdad?
     Por supuesto que no. No. Ésa es la conclusión a la que llegaría una persona racional que piensa acerca de la crisis de un modo racional. Entonces por supuesto los globalistas van a meternos la idea exactamente opuesta: Que una crisis como ésta demostrará cómo necesitamos aún más integración global entre todos los niveles de la sociedad pública y privada.
     ¿No me cree? Sólo lea el comunicado de prensa que la Universidad Johns Hopkins y los participantes del Event 201 publicaron el mes pasado justo antes de que "Wuhan" y "coronavirus" se convirtieran en temas de la conversación diaria:
     "La siguiente pandemia severa no sólo causará gran enfermedad y pérdida de vidas sino también podría provocar importantes consecuencias económicas y sociales que caen en cascada que podrían contribuir enormemente al impacto y sufrimiento global. Los esfuerzos para prevenir tales consecuencias o responder a ellas a medida que se despliegan requerirán niveles sin precedentes de colaboración entre gobiernos, organizaciones internacionales y el sector privado".
     Oh, así es. Esta es otra oportunidad para avanzar a pesar del fracaso. Después de todo, como aquel gran pronosticador globalista Rahm Emanuel nos dijo durante la última catástrofe financiera, el mantra de los elitistas globales es "nunca dejar que una buena crisis ocurra sin ser aprovechada". ¿Realmente piensa usted que esta "crisis" (real o imaginaria) sería una excepción?
por James Corbett (29.02.2020)

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