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7.5.20

Nadie tiene derecho de entrar en nuestras vidas y decir lo que nos conviene!

 © MENOS JABÓN Y MÁS ALEGRÍA!!!                     

Con el buen tiempo a la vuelta de la esquina ha llegado la hora de deshacernos de la pesadilla que nos ha tenido recluidos y acobardados. Basta de esta historia!
Ensanchemos el pecho, inspiremos bien fuerte y abrámonos de corazón y alma para recibir con todos los sentidos despiertos el gozo que la naturaleza nos ofrece.
Saciémonos con la luz y los colores que nos rodean por todas partes y que los olores que los acompañan penetren en nosotros y nos curen enjuagando todos los fantasmas que nos han inoculado (nos están inoculando todavía) por tierra, mar y aire. ..
Hagamos que brote la alegría de dentro de nosotros y compartámosla con todos con quienes nos encontremos. Utilicémosla de divisa para movernos por el mundo.
No es necesario que nos lavemos tanto. Lo que es necesario, antes que nada, es quitarnos el miedo de encima. Bañémonos con un buen chorro de alegría y optimismo y conseguiremos sacudirnos todo este infortunio de encima.
Nos quieren ablandados y despavoridos pero no se saldrán con la suya. La ilusión de vivir hará el gran milagro de contagiar el auténtico virus de la vida: LA FELICIDAD

Todos la tenemos a mano y sólo hemos de ser valientes para asumirla y disfrutar de ella.
Vamos a desplegar nuestra gran capacidad para ser felices y dejémonos de padecimientos artificiales, absurdos, impuestos y criminales.
Dejémonos de hacer de policías y chivatos de nuestros hermanos y unámonos en la rehabilitación de nuestras vidas. Cuanto más seamos antes lo conseguiremos.
No nos entreguemos de ninguna manera a las maquinaciones del poder que no quiere nuestro bien sino nuestra perdición.
Dejemos de tragar tele que es de donde viene el gran veneno que nos intoxica a todas horas y nos quita la confianza y la alegría de vivir.
Nos engañan y manipulan y lo seguirán haciendo si no le ponemos freno. Sino vamos a nuestro aire de una vez por todas y nos dejamos llevar por lo que nos dicta nuestro corazón.
Se ha terminado ya esta farsa indigna que nos ha sometido de forma ignominiosa.
Es hora de volver a coger el timón de nuestras vidas y plantarnos frente a quienes sólo quieren aprovecharse de nosotros sin miramiento alguno.
Ahora nos entreabren las puertas para que podamos respirar un poco. Muchas gracias !?
Lo que necesitamos es poder ir y venir cuando nos apetezca. Nadie tiene derecho de entrar en nuestras vidas y decir lo que nos conviene!
O sea que ya lo sabéis: Menos jabón y más alegría.

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