EL LENGUAJE SECRETO DE LOS ÁRBOLES
Erwin Thoma: Estoy
feliz de poder terminar un viaje con ustedes en un mundo completamente
diferente. Hoy hemos escuchado tanto sobre intereses, poder, manipulación,
estrategias... que necesitamos, otro tipo de cosas. Y me gustaría ver cómo
lidiar con todo eso.
¿Cómo se manifiesta esto en la creación, en la naturaleza? ¿Qué haces con los participantes más débiles en el juego, en la vida? ¿Qué estás haciendo para asegurar el futuro de varias generaciones? Y este viaje, me gustaría hacerlo contigo cerca de los árboles y en el bosque. Ahora quizás estés pensando: tiene una cabeza de madera, porque ¿qué tiene que ver el bosque y los árboles con esos temas, con estrategias sobre cómo los humanos debemos hacer la tierra justa y buena? Pero pronto verás que cuando uno está interesado en los árboles, entonces puede hacer lo que quiera, uno aterriza inevitablemente en los secretos profundos de la vida. Siempre es así cuando entras en la creación.
¿Qué es un árbol? Cada uno de ustedes ha visto un árbol
y lo ha tocado, lo ha abrazado o lo que sea. Un árbol es una masa pesada. Es
algo impresionante. Los árboles se encuentran entre los seres vivos más
antiguos de la tierra, han existido cien veces más que los humanos. Estamos
hablando de 500 millones de años. Y ayer vimos árboles tan hermosos con un
diámetro de tres cuartos de metro y tal vez 30-40 metros de altura. Tal
árbol, con sus ramas y agujas, puede pesar hasta diez toneladas. ¿De dónde
vienen estas diez toneladas?
Después de todo, una vez fue una semilla del tamaño de una cabeza de alfiler
que cayó al suelo y hoy son diez toneladas. ¿De dónde viene este
material? ¿Qué es esta madera, este personaje?
En la clase de biología, cuando estaba en la escuela secundaria, la maestra nos
dijo que los árboles crecen extrayendo nutrientes del suelo. Y pensábamos
que la madera era suelo transformado. Pero no encaja. Si las 10
toneladas vinieron del suelo, debería haber un gran agujero y no lo
hay. Pero puedo decirte exactamente lo que es: en un abeto así... hay
exactamente un 0,5% de la masa que proviene del suelo. El resto es aire y
algo de agua transformada. Cada árbol es un milagro. ¡Y ahí es donde
ya se detienen todas las explicaciones científicas! Cada árbol es aire,
que se materializa ante nuestros ojos, que se convierte en materia.
Cuando un árbol pequeño comienza a crecer, hace exactamente
lo que todos hicimos primero. Antes que nada... ¿Qué es lo primero cuando
comienza la vida? Respirar! Es la respuesta correcta. La
respuesta incorrecta que escucho a menudo es: gritar. Pero lo primero es respirar,
respirar, aahhhh. Y este aire es alimento para el árbol.
Porque los árboles han realizado el mayor invento de la vida
en la tierra, el color verde. No son verdes por casualidad. Este
verde es capaz de filtrar la luz del sol, de manera que prevalece una mezcla
muy especial de radiación en el interior de la hoja y en la aguja; y si el
CO², el gas del aire, circula por allí, entonces se descompone y el árbol ganó
carbono, carbono con el cual puede construir su cuerpo. Y lo mismo hace
con H²O, con agua. También se descompone y el árbol tiene
hidrógeno. Y un árbol es una composición química hidrocarbonada, con muy
pocos oligoelementos, que tienen una función importante; no son
importantes para la masa, pero tienen la importante función de dar a las
moléculas su determinación. Los convierten en células
específicas. Determinan si pasan a formar parte de la corteza, un trozo de
madera o un trozo de hoja u otra cosa. Aquí es donde la explicación
científica a nivel molecular se conoce en su forma más breve.
De todos modos, como decía, si seguimos preguntándonos y
diciendo: ¿quién controla esto? ¿Quién tuvo esta idea? ¿Cómo es
posible? No hay más respuestas en la ciencia. Tienes que buscar en la
religión o en la filosofía, pero no quiero ir más lejos hoy, cualquiera puede
buscar esa respuesta por sí mismo. Por supuesto, en última instancia,
tiene que haber una explicación en relación con la creación.
Pero lo que me apasiona es comparar el árbol con el
humano. Y me gustaría hacer la comparación de hardware primero. Cuando
cojo el microscopio electrónico y tomo una parte muy pequeña de su cuerpo, una
célula, y luego la descompongo y la examino, es muy sorprendente: los
componentes básicos de nuestro cuerpo son exactamente los mismos que los que
componen el árbol. Simplemente están compuestos de manera un poco
diferente. Los oligoelementos se colocan de manera diferente.
Entonces, cuando alguien me dice: "Tienes una cabeza de
madera", no es un insulto para nada, así que tienes que responderle: Claro
que es una cabeza de madera, pero gracias a Dios. La diferencia es que algunos
átomos muy pequeños se colocan de manera diferente. Me gustaría darles un
ejemplo impresionante de cómo estamos conectados, inseparablemente conectados
con la naturaleza, con la creación. Les dije que esa sustancia milagrosa
que hace el bosque, que hace que todo prospere y se desarrolle, es la
clorofila, el tinte verde.
Cuando miras una molécula de clorofila bajo un microscopio,
ves una estructura hermosa. Quizás la
mejor comparación sea con los cristales de nieve. Una maravillosa
estructura geométrica con carbono-hidrógeno, dispuestos
geométricamente. Cerca del centro hay un anillo de átomos de nitrógeno y
justo en el medio, curiosamente, un solo átomo de magnesio. Este magnesio, es
tan poco, comparado con la masa total, como si estuviera poniendo un grano de
sal en una mesa. No es importante para las masas. No es
mucho. Sin embargo, está en el medio. Seguramente eso tiene sentido.
Si hacemos un experimento ahora con la clorofila que es muy
importante, porque sin clorofila, los humanos no podrían existir. Toda la
vida orgánica se ha desarrollado gracias a esto. Está muy cerca del
secreto de la creación desde un punto de vista científico. Si ahora
elimino ese magnesio en el medio y lo reemplazo con un átomo de hierro, no he
cambiado nada en la masa de la estructura general. Es tan poco que no
importa, es insignificante. Pero una vez que pongo hierro en lugar de
magnesio, toda la estructura se vuelve roja y ya no tengo clorofila, tengo hemoglobina,
nuestra sangre. Somos tan parecidos, tan vecinos, tan cercanos a los
árboles. Y ahora puedo darles muchos ejemplos de este tipo de los campos
de la química, la física y la biología.
Entonces, si alguien dice: vivo aquí como el único y mi ego se
hincha y le doy forma a todo, ¡eso es un gran error! Puedes hacer lo que
quieras. ¡Estamos conectados a la Tierra! ¡Somos una
organización! Nosotros los humanos somos un organismo conectado a tierra. Y
aunque veo esas fantasías de poder. Olvídalo. Por supuesto que
existe. Pero estos son desarrollos indeseables que naturalmente están
colapsando nuevamente.
Me gustaría dar algunos ejemplos más sobre el árbol y el
hombre. Quizás otra diferencia importante. Cuando veo un árbol muy
pequeño en el bosque, o cuando planto uno, (he plantado miles de ellos),
entonces sucede algo realmente emocionante: un árbol pequeño que comienza la
vida sabe desde el primer día lo que quiere en este mundo, y lo sabe toda su
vida. Esta es, en mi opinión, la mayor diferencia con nosotros, los
humanos.
Un árbol sabe: “Tengo que crecer hacia arriba y tengo que
estirar mis brazos, mis ramas, mi copa, mis hojas para que me dé el
sol. Entonces puedo cumplir con todas mis tareas. Necesito la luz del
sol. El aire está ahí, el agua está ahí, todo ya está ahí. Y eso es
lo que quieren primero.
Entonces, al comienzo de su vida, participan en una
competencia, porque siempre hay muchos de ellos en el bosque. La
naturaleza es siempre derrochadora. Siempre hay muchas semillas que crecen
hacia arriba. Y luego están esos teóricos de la economía liberal de
mercado que dicen: la competencia lo gobierna todo, porque todo en la
naturaleza también se basa en la competencia. Es un error tan fatal que
nos lleva a desarrollos falsos en la economía.
Porque, en el bosque, hay competencia, pero solo muy brevemente. Hay
una carrera pequeña. Y cuando los
árboles están altos, nadie piensa en extender su poder. El punto donde
termina toda competencia es donde se asegura la vida del individuo. Tan
pronto como un árbol es grande, lo sabe en su célula más profunda: todos
estamos mejor si fraternizamos totalmente.
El bosque sabe: vienen tormentas, habrá sequía, habrá
relámpagos, habrá incendios forestales.
Habrá tantos desafíos que superar. Sólo podemos superarlos si somos
fraternos, lo más fraternos posible. Significa esa competencia, la ilusión
de que la naturaleza nos pone en competencia… Si alguien dice tal cosa o no
tiene idea de la vida o persigue ciertos intereses. De cualquier manera,
eso no es cierto. Biológicamente esto no es plausible. Y Gerhard
Wisnewski dijo una hermosa frase: “La vida es organización" Es verdad. La
vida, un cuerpo orgánico vivo, necesita organización por dentro y por fuera.
La organización sólo funciona si hay transmisión de
información. Si hay comunicación. En el caso de los árboles, existe
el lenguaje de los árboles. Este es el siguiente gran error: los humanos
vamos al bosque y muchas veces decimos: vamos al bosque porque está en
silencio. Pero es solo porque no entendemos lo que está pasando que está
tan tranquilo. Están pasando más cosas en el bosque que entre nosotros, los
humanos.
Comencemos con el crecimiento del árbol pequeño. Un
árbol pequeño se planta o cae al suelo como semilla y comienza a
crecer. Hemos escuchado antes que necesita agua y aire, pero necesita ese
0,5% de traza de minerales. Esas sustancias reguladoras que
necesita. ¿Cómo las consigue? Están en el complejo humus. Y un
árbol es -este también es un error común- una raíz no un trabajador de la
mina. La raíz no puede tomar nada de la tierra. Nada, ni un solo átomo.
Nada! La raíz necesita de alguien que reciba una orden, y que extraiga de
la tierra y lleve a la raíz exactamente el material que el árbol necesita en
ese momento. Necesita a alguien para hacer este trabajo. Y ese
“alguien” son los microorganismos.
Solo para tener una idea: en promedio, de diez a once
millones de microorganismos viven en una cucharadita de suelo forestal. Ni
siquiera es concebible para nuestro sentido común. Estos microorganismos
no hacen otra cosa en toda su vida, con los oligoelementos: saben que hoy
necesita hierro, mañana magnesio porque hace clorofila, pasado mañana calcio,
potasio, manganeso, todo tipo de cosas; estos oligoelementos los obtienen
de la tierra y los llevan hasta las puntas de las raíces más cercanas. ¿Son
estúpidos? ¿Trabajar toda la vida por nada?
Pero no te preocupes. Tampoco lo hacen por
nada. Los microorganismos viven como reyes. Todos son drogadictos y
obtienen algo del árbol que no existe en ningún otro lugar. Allí, en el
mundo oscuro. No existe en ninguna parte. Y eso es, comenzaré con la
fórmula química, para aquellos que trabajan en este campo: es C6 (carbono), H12
(hidrógeno), O6 (oxígeno). Eso es exactamente lo que tiene ese árbol allá
arriba. Y para cualquiera que sepa de química, es el
azúcar. Entonces, en la fotosíntesis allá arriba, no solo produce células
de madera, sino que también produce mucho azúcar en verano cuando brilla el sol
y fluye la savia. Y lleva el azúcar y lo distribuye a los
microorganismos. Cada vez que proporcionan algo, reciben una gota de
azúcar y para eso trabajan. Es una simbiosis. Es una gran
cooperación. Y también saben que solo uno lo logrará. Necesitamos
trabajar juntos y comunicarnos. Necesitan saber qué necesita el
árbol. Hay una gran cantidad de grandes investigaciones en biología sobre
esto.
Si yo voy al bosque y tomo un hacha, lo que suelo hacer como
guardabosques y marco un árbol, porque digo que el árbol se tiene que ir,
porque ya es muy grande y se puede derrumbar. Luego hago un agujero en el
tronco para que el silvicultor pueda encontrarlo y cortarlo. Es una
herida, un agujero así, y el árbol lo siente enseguida. Y en este caso,
sucede algo muy extraño. En unos minutos, en pleno verano durante el
período de crecimiento -si ocurre en verano- deja de crecer por
completo. Recibió el mensaje: “Hay una herida. Es
peligroso. Pueden entrar esporas de hongos, virus, bacterias, podrían
poner en peligro mi vida al pudrirse y cosas así. "De este
modo, inmediatamente deja de empujar hacia arriba. Deja de hacer
células y usa toda su fuerza para curar esa herida. Y lo más sorprendente
es que después de diez minutos miles de millones de criaturas terrestres saben
que hay una herida ahí arriba, que ahora se necesita algo más y traen otras
sustancias del complejo humus en las puntas de las raíces.
Cuanto más profundo miran en la naturaleza, más se
arrodillan ante los milagros de la creación de la vida. Es tan
impresionante. No hay nada más fantástico. Eso fue el tema de la
comunicación. O, cuando hace mucho calor en verano, una tormenta eléctrica
sopla a través de un valle y un rayo cae sobre un árbol, es desastroso, son
fuerzas increíbles. Lo he experimentado Suena increíble, pero una vez
estuve debajo de un árbol así y afortunadamente sobreviví. En ese momento
me puse de pie y dije: “Señor, todavía tienes algo que ver conmigo”, porque
normalmente estarías muerto. Desgarra el árbol por completo, por dentro, y
los pedazos salen volando. Es una fuerza prodigiosa. Si eso sucede y
vuelves al día siguiente al mismo lugar, es extraño. Al día siguiente,
miles y miles de botryches giran en torno a este árbol, que está condenado a
muerte, porque ya no tiene más fuerzas. A menudo me he preguntado... nunca
había visto un insecto así y de repente uno de esos árboles está débil y
enfermo, y ahí están.
Es la policía sanitaria del bosque. Su deber es sacar
al paciente para que no vaya más allá. Están allí al día
siguiente, luego irrumpen en los árboles que tienen un poder defensivo
increíble. Los primeros que entran, los reciben en la cara llenos de
resina, los clava y los asfixian. De esta manera la naturaleza mantiene el
equilibrio ecológico. Pero saben que es débil, que no puede
soportarlo. Sacrificamos los primeros mil y los demás se pueden
multiplicar y tenemos un millón más. Así es como funciona.
Y tan pronto como el primer árbol del bosque es atacado por
el escarabajo, sucede algo emocionante. Todo el mundo alrededor recibe el
mensaje: "Aquí hay un ataque de botryches" y aunque se asegura que
están en competencia y que se pasan la vida empujándose, como hacemos nosotros
en la economía, los árboles de los alrededores dejan de crecer de
inmediato. No dicen, “¡Hurra! ¡Ahora hay uno menos, tenemos más
espacio! Dejan de empujar, dejan de competir y juntos producen sustancias
exclusivamente de defensa contra los botryches. Increíble !
Cuando el primer árbol en la ladera de una montaña señala:
“Me estoy quedando sin agua, se está secando”, es un grave peligro para la
vida. Si nota que sus reservas de agua se están agotando, les dice a los
demás y tan pronto como reciben el mensaje, dicen juntos en todo el lado de la
montaña en cuestión: "Detengamos el crecimiento un 20 o 30%, y reduzcamos
nuestros poros en la misma proporción y ralenticemos todo juntos. »
Y luego está el seguimiento. Se observan unos a otros,
y si al día siguiente ya diez árboles dicen: "Nuestras reservas también se
están volviendo escasas", entonces bajan aún más a un crecimiento
cero. Seguramente hay árboles que en esta situación todavía están de pie
en un hueco húmedo y podrían decir "puedo disfrutarlo, ahora estoy
empujando hacia arriba", pero no lo hacen. Se aseguran de superar
esto juntos. Esta actitud no necesita explicación. No necesito
filosofar sobre eso, es obvio. Solo mira. Es fantástico, te lo digo.
Vengo de la industria de investigación de la madera, soy
contratista y he completado más de 1,000 proyectos de construcción de madera en
más de 30 países durante los últimos diez años. Y me siento cómodo en el
mundo de la tecnología, pero todavía estoy muy interesado en todo lo que hay
detrás. Y siempre me he preguntado, esta célula del árbol, es un milagro,
la comunicación, el lenguaje de los árboles. Antes tengo que decir cómo
funciona, esta comunicación en la sequía y todo eso. Probablemente no sepa
cómo se comunican: bueno, a través de Internet, eso es seguro. Internet es
un invento del bosque. Cada árbol tiene varias cepas de hongos
subterráneos y se estima que cada árbol tiene alrededor de 30, 40 o 50
kilómetros del mejor sistema de micelio de hongos del suelo forestal. El
suelo del bosque está ultra reticulado con filamentos de hongos que son
invisibles para nosotros. Y así como nuestros cuerpos pueden enviar
impulsos eléctricos a través del sistema nervioso, los árboles pueden enviar
impulsos bioquímicos de árbol en árbol a lo largo de los filamentos fúngicos.
Exactamente el mismo sistema. No funciona tan rápido
como el eléctrico, pero si tarda minutos en lugar de milisegundos, no importa
en el bosque. El suelo del bosque está ultra reticulado con filamentos de
hongos que son invisibles para nosotros. Y así como nuestros cuerpos
pueden enviar impulsos eléctricos a través del sistema nervioso, los árboles
pueden enviar impulsos bioquímicos de árbol en árbol a lo largo de los
filamentos fúngicos.
Es bastante rápido. Es el Internet del bosque. Así
es como se comunican. Por lo tanto, se comunican bioquímicamente a través
del sistema fúngico. Los hongos que recolectamos para comer son solo un
pequeño fenómeno en este vasto submundo de hongos. Y se comunican a través
de moléculas olorosas que envían al viento y que el siguiente recoge. Y
también hablan a través de moléculas olorosas a otros animales. Cuando
llega el escarabajo, inmediatamente envían moléculas de olor a todas las aves a
las que les gusta comer escarabajos. Para que los pájaros sepan: "Se
concentró aquí, no hay que esforzarse mucho, aquí puedes tener el estómago
lleno". Esto se llama equilibrio ecológico.
Así que ya ves podría hablar hasta que oscurezca. Realmente
necesito parar ahora.
Pero quiero mostrarte: la naturaleza es tan asombrosa. No necesitamos
cambiar nada. Por el contrario, debemos esforzarnos por preservar estos
maravillosos sistemas, y todo irá bien. No necesitamos intervenir como el
Creador, no somos el Creador. No estamos sentados en la cabina de la
naturaleza, somos sus beneficiarios autorizados para cosechar y
conservar. Realmente lo somos. Hasta aquí el lenguaje de los
árboles. Escribí un libro entero. Se llama “El lenguaje secreto de
los árboles”. Y puedes leer todo al respecto.
Pero las analogías con la vida humana son
fantásticas. Y también trabajé con científicos en eso. Y siempre me
he hecho la pregunta que tanto me ha fascinado: "Si una célula del árbol
es tan increíblemente parecida a nuestra célula humana, ¿por qué la célula de
nuestro cuerpo, si va muy bien, funciona 100 años y luego se acaba? Cuando
sé que hay árboles que durarán miles de años. El árbol más antiguo
conocido por la ciencia tiene 9.600 años. ¿Qué sabiduría han adquirido
estos seres para operar células de la misma sustancia fundamental durante
milenios? ¡Imagínese si pudiéramos resolver el misterio y luego preparar
una gran olla de elixir milagroso! Y te aplicas eso en la cara y mañana te
miras en el espejo y te ves como si tuvieras 17. Me atrevo a dudar que sea
bueno para nuestra psique. Pero al menos sería fascinante. Pero como
puede ver, hay una increíble cantidad de sabiduría, conocimiento y experiencia
en el bosque que puede beneficiarnos a los humanos.
Era sólo una pequeña introducción filosófica. Quiero
ser lo más concreto posible y no quedarme en la teoría, porque todo esto tiene
mucho que ver con nuestra vida, con mi vida, con la tuya, con la vida de tus
hijos y de nuestra descendencia. Tiene mucho que ver con nosotros. La
vida, el futuro, las idas y venidas de los árboles. Tiene mucho que ver
con nosotros. Porque nosotros, los humanos, como escuchamos Hagen, lo
expresaste muy bien, estamos en un callejón sin salida en varias
áreas. Todos estos intentos de tomar el poder son, en última instancia, un
acto de desesperación. Me llena de lástima la gente que dedica su vida a
esas cosas, es un acto desesperado. Y cuando miro la economía como
empresario, niego con la cabeza.
Como habrás oído, mi primera profesión, mi primera
formación, fue la silvicultura. Y yo estaba como, “Este es el trabajo de
mis sueños, ser guardabosques. Y tuve la suerte de ser el guardabosques
más joven de Austria. Con poco más de 20 años ya era
guardabosques. Yo era el único en ese momento. Pero fue una
coincidencia que no tenía nada que ver con mi eficiencia, sino con
circunstancias completamente diferentes. Es una coincidencia que yo era
joven... y comencé como guardabosques... Por primera vez no habían encontrado a
nadie para un puesto por el que generalmente muchas personas se pelean, nadie
para este puesto en la región montañosa de Karwendel en Tirol. Y la razón
por la que no pudieron encontrar uno, era que la cabaña del guardabosques
estaba a 80 km de la oficina regional y que en invierno te sepultaba la nieve
durante semanas. Todavía no había barreras contra avalanchas. Cuando
llegó la avalancha, simplemente cerraron el valle y tuviste que sobrevivir por
tu cuenta.
Y tuve mucha suerte... He estado casado durante casi 40 años... y tuve mucha
suerte de que mi esposa, justo antes de eso cuando estaba enamorada de mí, me
dijo: “Iré a todas partes contigo. "Imagina eso. Y tan pronto
como lo dijo, escuché que había una estación de guardabosques por la que no
podían volverse locos. Y solicité y me transfirieron allí.
Y aquí estamos los dos frente a la casa del guardabosques en
medio del bosque y no había luz. Era una situación de autosuficiencia, ¡y
fue maravilloso! Para mí fue un sueño porque pasé todo el día en el bosque
y pude realizarme lejos de la burocracia. En invierno estaba oscuro,
teníamos un hijo cada año, era una época maravillosa.
Y en el chalet del bosque, además de experiencias
humorísticas, pude vivir experiencias muy profundas. Yo era un joven
técnico, ingeniero y estaba convencido de la tecnología. Vi cómo, usando
métodos medievales, los trabajadores forestales morían en el trabajo. Vi
accidentes de trabajo cuando bajaban por el bosque de la montaña con un
trineo. Fue muy difícil y laborioso. Y luego estaban las máquinas, un
verdadero alivio. Y al principio, encontramos que eran una
bendición. Y traté de poner tecnología allí. Y era como si esa
cosmovisión tuviera que ser sacudida solo por la tecnología, siempre tenía que
experimentar.
Por ejemplo, un día, dos hombres vinieron a verme y me
dijeron: “Somos dos lauderos y hemos oído que en la Edad Media los grandes
maestros de la lutería encontraron su madera en los altos valles de
Karwendel. Me preguntaron si estaba listo para buscar esos árboles con
ellos. Así que pensé para mis adentros: "Eso suena interesante, solo
lo sé de oídas, así que iré a buscar". Y cuando subimos allá en uno
de estos valles, me explicaron que se necesita un árbol de violín que creciera
muy tranquilo, muy bien y por lo tanto en las montañas. Y los mejores
árboles que tienen tales mutaciones genéticas, que no tienen una línea recta,
que tienen fibras tan onduladas, son extremadamente difíciles y raros de
encontrar.
Entonces empezaron a golpear los árboles allá arriba en el
bosque y a escuchar. Para mí, siempre fue el mismo “toc, toc”. No
escuché ninguna diferencia. Y luego me aburrí. Luego me fui a otro
lado y después de unas horas regresé, todos estaban emocionados y me dijeron:
“Encontramos un árbol que podría ser bueno. Así que dije: "Bueno, voy
a echar un vistazo". Bajé al camino donde estaba mi viejo escarabajo
VW y saqué la motosierra, tomé un hacha y algunas cuñas, volví a subir y corté
el tronco del árbol. Hice un corte. Como el árbol era muy viejo, se
derrumbó.
De todos modos tuve que hacer cortes. Hice la muesca de
derribo, hice el corte de derribo, lo acorralé y en algún momento la parte
superior comenzó a temblar. Entonces el árbol se dobla, se para al final
solo sobre un pequeño trozo de madera... Y se cae. Y en esos momentos,
cuando tú, un pequeño con una sierra ruidosa, cortas un ser vivo, siempre es,
para mí, un momento en el que vuelvo a mí mismo. Estaba muy tranquilo y me
sequé el sudor de la frente y miré: Wow. Y ambos inmediatamente se
arrodillaron y miraron el corte, los anillos de crecimiento del
árbol. Porque los anillos de crecimiento anual son su diario. Es allí
donde escribe toda su vida.
Puedes ver por lo que pasó. Ves, por ejemplo, si no
tenía luz cuando era pequeño porque el padre era demasiado poderoso y no dejaba
crecer al niño. Así que las coronas luego vegetan y no tienen ninguna
posibilidad. Por eso es tan importante que los árboles viejos del bosque
desaparezcan. Solo cuando se eliminan los árboles grandes, los árboles
jóvenes tienen una oportunidad: es un proceso natural. O ves, si hubo
hambre, sequía, si el suelo empieza a resbalar, porque todo se
refleja. Tiene que hacer madera de reacción, sostenerse, etc. Y todos
estos procesos son malos porque crean tensión en la madera. No había nada
de eso con este árbol, ¡era perfecto! Y la fibra estaba tan ondulada. No
podía creerlo, pensé: “¿Cómo pueden escuchar eso? Pero así
fue. Y lo miraron, estaban más que contentos, y les vendí un trozo de
madera. Se fueron en el auto, encantados, y luego ya no lo pensé
más. Mi tarea era vender la madera por 1.000 metros cúbicos a la gran
industria. Y no tan pequeñas secciones. Era solo un pasatiempo para
mí.
Un año más tarde, hay otro golpe en la puerta... las mismas
dos personas están paradas afuera de mi puerta principal otra vez. Los
reconocí y les dije: “Si todavía quieren buscar madera de violín este año,
entonces vayan solos y yo vendré más tarde” Dijeron “No”. “No estamos aquí
para buscar madera, hemos venido a agradecerselo. Porque el baúl estaba
perfecto. Y me explicaron que normalmente tienes que almacenar la madera
durante diez años antes de que realmente puedas hacer violines.
Pero pudieron dibujar una gran cantidad de espacios en
blanco y ya han hecho un violín de una pieza. Y el violín finalmente fue
tan maravilloso que no podían creerlo. Estaba un poco abrumado porque
estaba pensando – dije: “Podrías haber escrito una postal y no llegar tan
lejos.
Pero ellos dijeron: "No". Hemos decidido agradeceros con un
concierto. Sacaron el violín del auto. Entré en la casa, recogí a mi
esposa, mis hijos y mi perro, todos estaban parados allí, y luego ambos
comenzaron a jugar.
Y me dije a mí mismo: “Wow” – Siempre estaba solo en el
bosque, en verano, en invierno, escuchas tantas voces allí. Cada día es
diferente en el bosque. No es solo la humedad del aire lo que cambia, el
viento, la lluvia, la nieve, la escarcha, el deshielo, ¡siempre es diferente! Pero
pensé para mis adentros: “Esa voz del árbol que yo mismo corté, nunca hubiera
esperado eso. Y ellos estaban tocando el violín, en medio del bosque, y
pensé: "Es otro mundo". Y luego los invitamos a comer. Y me
explicaron: “Un violín no es más que medio kilo de madera, pero puesto en la
mejor forma. Con todo el amor, con toda la experiencia, con toda la
maestría que la gente ha adquirido a lo largo de los siglos. »
Entonces me dije: “Si no hubieran venido, habría llevado
este árbol, este árbol maravilloso, a un aserradero grande y lo habrían cortado
en tablas y lo habrían puesto en algún lugar. » ¡Sin valor
añadido! ¡Sin valoración! Les dije eso, se rieron y dijeron: “¡Sí, el
valor agregado en nuestro sector es enorme! Si consideras un violín de
Stradivarius o de Guarnerius, de esos grandes maestros, hoy tiene peso, vale
cien veces más en oro que medio kilo de madera. Así que dije: "¡Oh,
Dios mío, estoy enviando árboles a la fábrica de aglomerado, están convirtiendo
los árboles en desechos peligrosos!" Y yo que pensaba que vivía en
tiempos modernos donde todo había mejorado. Y comencé a dudar de lo que
estábamos haciendo.
Y luego estaba el abuelo en nuestra familia. Era un
carpintero de 80 años. Y a los cinco años, Florian comenzó la
escuela. Entonces dije – aunque hubiera sido inimaginable hace unos años…
Dejé mi puesto seguro del estado y tomé esta decisión con mi abuelo: Los dos –
él tenía más de 80 años, yo tenía 26 o 27 – vamos a empezar un negocio. Quería
descubrir el secreto de los árboles. En mi corazón, simplemente había esta
llamada: ¡Debo ir a la naturaleza! Y contra todo sentido común, seguí este
llamado del corazón.
No fue tan divertido. Si eres padre de niños pequeños y
responsable de alimentar a la familia y dices: "Estoy lanzando una acción
de alto riesgo" y no tengo un plan de negocios o... nada de nada, solo el abuelo
como asesor de negocios. Así que el abuelo dijo: “¡Cuidado! si los
dos trabajamos juntos, debes tomar la madera en su mejor forma. Fue
entonces cuando pensé: "Sí, sí, en la mejor forma, tiene sentido, hay que
llevar un buen árbol". Él dijo: “No, no. Tienes que cosechar
moonwood en el momento adecuado. »
Yo no estaba cómodo con eso. Porque yo estudié
silvicultura, él no. Y no me dijeron que era importante. Yo tuve
suerte, él tuvo mala suerte. Pude hacer el entrenamiento que
quería. Quedó huérfano cuando tenía 7 años. Tras el final de la
Primera Guerra Mundial, aprendió el oficio de carpintero con gran
dificultad. Y luego terminó en Rusia, en el frente oriental. Era su
vida, sin entrenamiento. El año pasado, en Crimea, visité los lugares por
donde tenía que pasar, donde murieron todos sus camaradas. Horrible
! Qué suerte tenemos de vivir en tanta paz.
Y yo era un poco arrogante en ese momento y dije: “El abuelo
y el moonwood. Olvídalo, esoterismo, no vale para nada. Pero él era
terco hasta que me obligó a cosechar mi primer lote de moonwood. En
invierno, cortamos los árboles en enero en nieve profunda. Estuve allí,
escribí la “T” de Thoma en cada árbol, para poder enviarlo a nuestro pequeño
aserradero. Así que ya hemos comenzado a construir un pequeño
aserradero. Y en la luna nueva, dije: “Esto es todo. Los pocos
cientos de metros que hemos cortado están guardados en la dehesa de
montaña. Porque ahora la luna está cambiando. Y el abuelo dijo:
"No puedo hacer nada más". Y algunos madereros decían: "Sí,
sí, los viejos tienen razón". Ese es un buen punto.
En la primavera, en mayo, la madera todavía estaba en el
pasto. Revisé. Los madereros continuaron trabajando después de que
renuncié. Pero un vecino cortó la madera después. Y también lo
almacenó en el pasto de la montaña, 50 m más allá. En la primavera,
llegaron los escarabajos y fueron sin excepción al bosque vecino. Y el mío
se salvó. Entonces me encontré en el pasto de la montaña y me dije: “Soy
una persona lúcida y el escarabajo no tiene placebo. El escarabajo debería
haber invadido las dos pilas de madera, si estaba allí. “Pero no lo hizo. Así
que pensé: "Abuelo, tú sabes cosas que yo no tengo idea". Y me
humillé y le dije: “Abuelo, yo no lo creía. Entonces me dijo: "Te
sorprenderás, verás que el hongo no se mete ahí". »
Por tanto, hemos llegado a la conclusión de que esta madera
dura años, décadas, siglos más cuando está integrada en una construcción, y que
no necesitamos ni una gota de este producto tóxico para conservar la madera, si
trabajamos así. Y luego me di cuenta de qué tesoro me dio el
anciano. Y solo entonces me di cuenta de que, por supuesto, no tiene
sentido enseñar a los jóvenes técnicos en las escuelas cómo la industria
química no hace negocios, tiene sentido. Había regalos de esta misma
industria en cada salón de clases, para que pudiera enseñarse. ¡Guau!
Y luego comencé a escribir cosas y las escribí porque dije:
“Para los niños pequeños, algún día serán grandes, tal vez les interese. Y
escribí un diario.
Un día, un editor vino a verme. Quería comprar un
piso. No era una casa en ese momento, un piso pequeño. Y comenzamos
la conversación y también tocamos el tema de "moonwood". Y así
le expliqué y le dije como te lo estoy diciendo ahora. Y hojeé mis notas
porque quería mostrarle exactamente de dónde vino la madera para su
piso. Así que mira, escucha y dice: “Señor Thoma, tiene que escribir un
libro. Es muy interesante. Y me reí y dije en ese momento: "Soy
una cabeza de madera". No sé cómo escribir un libro. Así que
dijo: "Has escrito un libro". El manuscrito está tirado
allí. “No es un manuscrito, es mi diario para niños, pero no para un
libro. Así que él dijo: “Solo enmárquelo para que pueda leerlo como
un texto continuo, entonces tendrá un libro maravillosamente
interesante. Pensé para mis adentros: "Tal vez no sea una mala idea,
ya que yo también lo obtuve como regalo de mi abuelo". Lo pensé y
dije: "¿Por qué no?".
A los pocos días voy a ver a mi contador para aclarar unas
dudas contables y después nos tomamos un café y me dice: “¿Cómo
estás? Hablamos y dije: "Sabes, es gracioso, creo que voy a escribir
un libro". Se rió y dijo: "¿Pero qué quieres escribir, para un
libro?" Entonces le conté la historia, él escuchó en silencio, luego
dijo: “Escucha, ahora te digo algo: te acompañé en los años fundacionales más
difíciles. Pocos jóvenes emprendedores sobreviven a tal riesgo. Y
tienes suerte de que tu abuelo te haya dado un conocimiento tan
especial. Es una ventaja de saber hacer, es un paso adelante. Hay que
protegerlo, defenderlo, hay que ponerlo en una caja fuerte, no en un
libro. ¿Quieres escribir un libro para que todos te imiten. Estás
loco? Así que pensé: "Él también tiene razón". "¿Qué
debería hacer ahora?" Yo estaba completamente inquieto y me fui a
casa. Y pensé: "¿Qué debo hacer? »
Si ya no saben cómo avanzar, ¡cállense! No importa
cómo, si vas en oración o no, no importa. Pero ve en silencio. Y eso
fue lo que hice. Hablé con mi esposa al respecto y lo pensé. Y
sentado debajo de un árbol, pensé: “¿Qué estás haciendo, árbol, para tener
éxito así? Me dije a mí mismo: “¡Sí, eso es todo! » ¿Sabes qué árbol
es el más exitoso? ¡El árbol más exitoso es el que da la mayor parte de su
conocimiento, su mayor riqueza! Y el perdedor es el que acumula su riqueza. ¡Siempre,
siempre, siempre, siempre!
¿Recuerdas la historia del azúcar? El azúcar es el oro
del bosque; con azúcar se puede conseguir todo en el mundo de las
plantas. Todo, toda la tierra te sirve si tienes azúcar. Y el árbol
que más da, más recibe a cambio. Realmente es así. Y cuando lo hice…
más tarde cuando mi hija empezó a estudiar administración de empresas, me fui a
tiempo parcial y estudié economía. Y ahí, es todo lo contrario, que
aprendí. Aprendes muchas cosas, pero exactamente lo contrario. Pero en
ese momento, solo me reí de eso porque ya sabía lo mejor. Seré breve,
decidí escribir el libro porque me dije: “¿Cuál es el punto? ¿Qué se
supone que debo acumular ahora? Este conocimiento, fue mi abuelo quien me
lo dio; yo también lo regalo Si no lo hubiera hecho, no estaría
aquí. No estaré ahí. No tienes idea de lo que pasó.
Lo primero es esto: salió el libro, fue completamente poco
profesional. No tenía idea de lo que es escribir. El libro salió y
fue un éxito de ventas; Inmediatamente vendimos las primeras 100.000
copias. Un número increíble. Y recibí una avalancha de cartas, de
devoluciones, provenientes de silvicultores, leñadores, carpinteros, viejos
maestros carpinteros, ebanistas, que escribieron: "Estamos muy contentos
de que alguien esté transmitiendo esta experiencia y ahora les escribimos lo
que hemos experimentado. Recibí una biblioteca de conocimiento que no se
puede comprar en ninguna parte del mundo. Fue el primer gracias. Es
increíble.
Al mismo tiempo, fui atacado en los términos más
fuertes. La industria química y la gran industria del aglomerado entraron
y dijeron: "Moonwood, si vendes cinco mil libras, no nos importa, pero si
vendes cien mil libras, los clientes empiezan a acudir a nosotros. Bueno, no
nos gusta eso. Así que dieron una orden de mando para estudios que afirman
que la madera de luna es basura. Esto esta pesado! Si quieres
sobrevivir como emprendedor y hay un estudio oficial de que es una mierda y
engañas a la gente, primero tienes que sobrevivir. Fue una prueba amarga,
pero sabes que si uno sobrevive a una prueba, es que fue buena.
¿Y sabes cómo sobrevivimos a eso? Eso fue lo más
divertido. Después de muchas cartas positivas, nos preguntaron si
queríamos recibir una delegación de Japón. Así que me dije a mí mismo:
“Solo conozco Japón por la geografía, pero que vengan si quieren. Entonces
vino gente de Japón y el líder de la delegación era un monje budista, un hombre
bajo, envuelto en una tela naranja y tenían intérpretes con ellos, estaban muy
bien preparados y hacían muchas preguntas sobre esto. . Así que dije:
"Por favor, tengo que preguntarte por qué viniste". Entonces el
hombre me dice que él es el director del monasterio, que es el edificio de
madera más antiguo del mundo. Es un edificio de madera de 1.650 años de
antigüedad, pagodas y edificios similares. Y en el monasterio hay
registros exactos de cómo se cosechó la madera, cuándo se cosechó, cómo se secó
y se procesó. Y es 100% consistente con lo que describí en el
libro. Y estaban tan sorprendidos de que alguien en Europa escribiera algo
así, que decidieron conocer a esta persona. Aquí es donde me quedé
atónito. Estaba sentado allí y dije: “Lo único que puedo decir sobre eso
es que fue el abuelo, que ciertamente nunca había estado en Japón y decidieron
conocer a esta persona.
Sí, sí… es gracioso, pero al mismo tiempo me excluyeron
categóricamente de todas las licitaciones en mi país de origen,
Austria. No tuvimos la suerte de encontrar trabajo y el monje me dijo al
despedirnos: “Está bien lo que estás haciendo. ¿Dije por
qué?" Entonces él dijo: "Porque trabajas de una manera que no
deja rastro en la Tierra". Esto me conmovió mucho, porque nuestra
principal preocupación era construir una casa de tal manera que siguiera siendo
buena para las generaciones venideras. En otras palabras: que esté
completamente libre de desechos y basura, que no desprenda gases
químicos. Los pegamentos utilizados en la industria de la madera son todos
altamente tóxicos. Reemplazamos todo con encuadernaciones de
madera. Y hemos sufrido tanto que este trabajo, que nos ha llevado al
límite de nuestras fuerzas, no es apreciado. Y luego llegan los japoneses
y lo agradecen. Bueno, eso fue reconfortante. Entonces me dijo: “Por
eso yo te apoyaré. Le di las gracias, pero todavía estaba el incrédulo
Thomas en mí que pensó: "Eso está muy bien dicho... Pero no vas a apoyarme
en absoluto, porque nunca te volveré a ver". Pero no lo dije, por
supuesto
Dos semanas después, recibí una llamada de un editor de
Tokio; no es que él quisiera, tenía que traducir mi libro al japonés y ponerlo
en el mercado, si estaba de acuerdo. Claro que yo lo estaba. La
traducción japonesa fue la primera traducción de mis libros. Y dos años
más tarde, tenía más casas en el lejano Japón que en mi Austria natal. Y
todos los clientes japoneses, todos sin excepción, antes de que tomáramos una
tabla en nuestras manos, habían transferido con confianza el 100% del dinero
por adelantado y ni una sola vez negociaron un descuento. Era increíble. Y
con este impulso, que vino de la generosidad, pudimos desarrollar toda la
empresa y construí mi centro de investigación.
Y allí supe, allí lo experimenté yo mismo, allí Tomás el
incrédulo convertido, allí supe que funciona! La creación funciona cuando haces higiene del alma. Si te las
arreglas para mantener todas esas tonterías fuera. Y si giras hacia el
lado donde hay vida, funciona. Allí serás llevado. No tengo mucho… sé
tan poco de tu vida. Pero cuando miro lo que hay aquí, no lo habrías
imaginado al principio. Pero hay que tener el coraje de dar el paso y
decir: “Me estoy metiendo. “Entonces serás llevado.
¡Sí, madera de luna! Pero, por supuesto, eso fue solo
el comienzo. Fue entonces cuando nos dimos cuenta que ¡esos ataques fueron
extremadamente valiosos! He perdonado a todos los abusadores desde el
fondo de mi corazón y hoy les estoy agradecido. Son herramientas, sin
saberlo. Porque me enseñaron que la ciencia y el conocimiento antiguo
deben ir de la mano. Que no hay oposición, que se trata de dejar que la naturaleza entre en la vida. Y no
decir: “Soy miembro del partido de la naturaleza”. ¡No hay nada como
eso! ¡Somos una unidad!
Y me di cuenta de esto: Hay que investigar, investigar,
investigar. Entonces dijimos: ¡fuera todos los productos químicos! Primero
desarrollamos paredes de madera maciza ensambladas mecánicamente.
Luego hice las primeras pruebas de resistencia al
fuego. A principios de los años 90, las mejores y más resistentes
construcciones de madera del mundo podían soportar 30 minutos de llamas
experimentales en laboratorios de ensayo. Pero con nuestras paredes y techos
gruesos, el aceite del quemador se acabó después de dos horas durante la
primera prueba de fuego en el laboratorio. Luego tuvieron que repetir la
prueba y fuimos los primeros en el mundo en recibir la certificación F180: tres
horas de seguridad contra incendios. ¡Después de tres horas, todo ya está
evacuado durante mucho tiempo! No se puede hacer eso con hormigón
armado. Porque cuando se quema a 1000 grados, después de media hora a una
hora, el hierro del hormigón armado se recuece y se derrumba.
Luego, en los años 90 y especialmente después del cambio de
milenio, hubo esta campaña de aislamiento. ¡Siempre es lo mismo! ¡El
objetivo es correcto, por supuesto! Es solo que no deberíamos saquear
petróleo en algún lugar para transportarlo, arriesgadamente, alrededor del
mundo, y luego quemarlo, solo para calentar nuestros hogares. Es demasiado
valioso. Pero explicarle a la gente que para ahorrar energía tienen que
envolver todas las casas en poliestireno tóxico, en el que las casas se pudren
y ya nadie puede deshacerse de él… ¡la verdadera suciedad es una locura!
Siendo auténticos marginales, siempre hemos dicho: ¡nunca
publicamos, nunca! Construye primero, porque entonces nadie puede decir
"¡No funciona!" » Hable de ello sólo después. Como
verdaderos forasteros, apoyados por grandes personas, ETH Zurich (Instituto
Federal Suizo de Tecnología de Zurich), siempre hemos trabajado muy bien con
las universidades suizas ¡Primeras casas autosuficientes
energéticamente! ¡Estoy construyendo una casa para quien la quiera, una
casa que calienta y enfría todo el año! ¡Nunca más frío que 18 grados y
nunca más caliente que 24 grados! ¡Sin que necesites una estufa! Solo
con el sol brillando en el techo y con el calor acumulado en el espesor de la
madera. ¡La madera aísla durante más de un mes! ¡Esto es lo que hemos
desarrollado! Es lo que nos da la naturaleza, ¡funciona!
Tal como dijo Bárbara: “No necesito Ritalin, me las puedo
arreglar de otra manera”. Damas y caballeros, ¡no necesito
aislamiento! La crisis energética no es un problema para mí. No
tenemos una crisis energética. Para nada ! ¡Tenemos malos conceptos! Es
todo !
¡Tuve que hacerlo y pude construir cinco fábricas en mi
vida! Y yo recuerdo cuando construimos la primera fábrica, me dije: Ahora
hay que hacerla muy grande, porque si hacemos hoteles o... Primero construimos
casas individuales, luego edificios de 4 pisos, luego construimos la primera
casa en el centro de la ciudad de Hamburgo, edificio solo con madera. Y
trajimos todos los certificados de seguridad contra incendios e hicimos los
hoteles de madera más silenciosos del mundo. Luego recibimos el
maravilloso pedido de construir una universidad en Moscú... hicimos grandes
cosas. Y luego se hizo más grande. Así que me dije a mí mismo: “¿Cómo
está ahora?
Ahora necesitamos grandes fábricas, grandes
salones, mucho más grande que aquí, y hay grandes máquinas adentro.
¿También tengo que aprovechar la red y la energía nuclear? Si hago eso,
llego al callejón sin salida de la adicción”. Mi fábrica más grande, donde
construimos la mayoría de las casas, está al norte de Basilea en Alemania, muy
cerca de Friburgo en la Selva Negra. ¡Todo funciona con energía
solar! ¡Con el sol brillando en el techo! ¡Todo funciona, todas las
máquinas funcionan! No importa que ! Cada casa que sale de una
fábrica así si hay que desmontarla se puede desmontar… duran 500 años, tanto
duran… Y si hay que desmontar no se tira nada, ¡será una casa otra
vez! Podemos desatornillar las paredes, vuelve a la fábrica,
¡No hay escasez de materias primas, señoras y
señores! ¡Para mí es escandaloso que asustemos a la gente diciendo que la
escasez reina en la tierra! Es la broma más desagradable que
existe. ¡Tierra, la creación de Dios es un lugar de abundancia y
alegría! Sal en primavera y mira un cerezo. El cerezo tiene la tarea
de transportar digamos 1.000 cerezas. Si hubiera estado en McKinsey y
hubiera aprendido, habría cultivado exactamente 1.020 flores. Porque todo
lo demás es desperdicio. Pero tiene 100.000 flores si quiere 1.000
cerezas. ¡O incluso más! ¡Hay un montón de ellos! ¡Suficiente
para todos!
¡Y así es como funciona! Se nos dice por ejemplo: “Sí,
ahora tenemos muy poca madera o muy poco manganeso o muy pocos recursos
mineros, porque a todos les gustaría tener un teléfono móvil”. Pasemos a
otro ejemplo. ¡Ya sabes lo que pasa con los desechos
electrónicos! ¿Sabes lo que vamos a hacer con eso? En una tonelada de
desechos electrónicos, la proporción en peso de recursos minerales es unas diez
veces mayor que en el mineral del Congo, donde se extrae como materia
prima. ¡Pero no recuperamos nada! Tiramos los desechos electrónicos
en algún lugar de Rotterdam en un viejo carguero, los enviamos a la costa de
África occidental o donde sea, donde la gente está indefensa y tiramos
todos los desechos tóxicos en un montón. Y los más pobres de los pobres
aún pueden sacar un cable de cobre, ¡pero todo lo demás se pierde! Hemos
aterrizado en el callejón sin salida de la economía derrochadora y
desechable.
En mis estudios de economía aprendí esto: “Cuando empiezas
con un nuevo producto, tienes que empezar desde el principio, antes que nada
hacer un estudio de mercado”. Digamos que hago una maquinilla de afeitar
eléctrica. Tendré que hacer una investigación de mercado: ¿Quién está
comprando esta navaja, quién la comprará? ¿Y qué hay de su
memoria? ¿Cuándo puede estar fuera de servicio la afeitadora eléctrica
para que el consumidor compre una nueva sin enfadarse? Luego, en el caso
de la navaja, llegas a la conclusión de que si se estropea a los dos años
el consumidor no volverá a comprar la marca, si se estropea a los cinco años la
volverá a comprar. Y así, la maquinilla de afeitar eléctrica debe ser
construida por los técnicos para que esté fuera de servicio después de cinco
años. Esto se denomina obsolescencia planificada, desgaste
planificado. ¡Es un escándalo! No hay estrategia de marketing, ¡es
indignante! ¡Está robando el futuro de los niños! Así es como operamos
en la economía..
Pero cuando miro en el bosque, ¡allí es muy
diferente! Cada hormiga construye su casa de tal manera que cuando se va,
todo es reutilizado por la siguiente colonia. ¡No hay basura, no hay
basura! Se nos dice que somos demasiados en esta tierra. Que vamos a
llegar al punto en que las materias primas ya no alcanzan. Es un cálculo
muy simple:
Actualmente somos siete mil millones de personas, con un
peso medio de digamos 70 kg. 7 x 7 = 49. Así que hay 500 millones de
toneladas de personas vivas caminando por la tierra. Por ahora, todo bien.
Los biólogos pueden calcular el peso de todas las hormigas y termitas que
caminan. Es increíble. El mundo de los insectos todavía está
subestimado, pesan 6-7 veces más que nosotros los humanos. Increíble !
¿Alguna vez has escuchado a alguien decir: "Hormigas,
esas bestias asquerosas, se comen todo, es demasiado, ahora los recursos se
están acabando". No, por supuesto que no, porque estos animales viven
en una economía circular. Diseñan cada producto de tal manera que todo
pueda ser reutilizado.
Y si hubiésemos construido ciudades hace cien o quinientos
años a partir de casas donde todo pudiera desarmarse y reutilizarse, entonces
no necesitaría un bosque como proveedor de materias primas. Entonces nunca
correría el riesgo de que saquearan el bosque.
Pero cuando salgo al bosque como Ikea, convierto todo en
aglomerado, diseño los muebles para que se rompan al primer movimiento, para
que el cliente tenga que comprar otros nuevos y los desechos sean una carga para
los que tienen que deshacerse de ellos. Pero el público paga de todos modos...
entonces surge la cuestión de los recursos.
Os lo he explicado detalladamente porque os digo: En este
mundo no hay razón para tener miedo, ninguna. Y hay otra ley muy importante, y
ahora llego a mi último capítulo:
Una ley muy importante en la naturaleza afuera, cerca de los
árboles, no existe la ideología o la moralidad, no existe tal cosa. Todo
está lo más descentralizado posible. Y ahí fuera, toda experiencia está
permitida. No hay nadie que diga: "Horror, no hagas eso, porque es
malo cuando te bajas los pantalones o haces cualquier otra cosa". No
existe tal cosa. Pero a la inversa, para que todo sea permitido, la
responsabilidad siempre es de quien lo hace.
Un directivo que experimenta con algo y que dice que el precio lo pagarán los
demás, eso no existe. Todo el mundo puede intentar cualquier cosa, pero es
cada uno quien tiene la responsabilidad. Y de ahí salió algo raro, al
menos eso observé: Lo mejor es siempre lo que sirve a la vida de todos. Lo
que sirve a la vida de todos es lo que tendrá éxito, y eso es increíble.
Y ahora llego al tema de la “salud”, porque obviamente la
salud es algo importante para las personas. El material de la madera tiene
una influencia muy relevante e impactante en nuestra salud, porque así fue
creado.
El árbol tiene mucho
que ver con nuestra salud.
Escribí el libro: "El lenguaje secreto de los
árboles" y luego conocí a uno de los investigadores médicos más
renombrados y respetados de Austria, un tal profesor Maximilian Moser, que
tenía su cátedra en la Facultad de Medicina de Graz. Y durante este tiempo
-estuvimos involucrados en esto- se realizaron experimentos para ver
fisiológicamente qué le sucede a un ser humano si vive, trabaja o duerme en una
casa de madera, o en una casa construida comercialmente con placas de yeso y
materiales sintéticos como los conocemos. ¡Los resultados fueron
impresionantes!
Al principio hicimos dos dormitorios: uno en madera y el
otro en imitación madera, en laminado, es decir en plástico que parece madera. Cualquiera
que duerma en madera pura se ahorra una hora entera de trabajo del corazón en
una noche. Los habitantes de Graz eran especialistas en medir el sistema
nervioso vegetativo. También habían desarrollado un nuevo
procedimiento. Cualquiera que duerma o trabaje en una habitación de madera
tiene más posibilidades de recuperarse cuando está enfermo, tiene un sistema
nervioso vegetativo más fuerte, mejor concentración… Increíble !
Me fascinaron estas experiencias y de paso le hablé de esto
a mi editor en el momento del libro “El lenguaje de los árboles”. Entonces
nada pudo detenerlo. Él dijo: “Erwin, necesito que me escribas un libro
sobre la madera y la salud. »
Me resistí mucho porque dije: “Hannes, no soy
médico. No me siento llamado a escribir seriamente sobre el tema de la
salud. No puedes hacer eso si no eres médico. No tengo suficientes
conocimientos básicos. »
Un día me dijo: “Ahora me vas a escribir este libro" Recibí
el acuerdo del profesor Moser, él hará por usted la redacción de todo lo que es
médico. Y entonces tienes toda la Universidad de Graz detrás de ti, la
facultad de medicina más renombrada. Dije: "¡Guau, eso es
increíble!" Es una gran oportunidad. Si aguanta, lo haré. »
Luego nos reunimos en la redacción de Salzburgo. Puse
una condición: "Estimado profesor Moser, si así es como debe ser, entonces
debe responder las preguntas más estúpidas que puedo hacer como
profano". Necesito, por así decirlo, que todo lo que está en el libro
esté probado médica y científicamente. El dijo que sí.
Y ha comenzado una nueva aventura.
Crecí muy rústico cuando era niño. No quiero comparar
esta época con la actualidad, es impensable. Crecimos de manera muy
diferente a los niños de hoy. Imagínese: si hoy una maestra de jardín de
infantes les dijera a los niños: “Queridos niños, hoy vamos a jugar todo el día
en la pila de estiércol. No podemos hacer eso. Las condiciones
higiénicas eran completamente diferentes. Estábamos en la finca, teníamos que
trabajar mucho, todo era completamente diferente. Pero de esa infancia,
traje recuerdos y me los llevé. Me acordé… todavía tenemos una pequeña
granja en casa hoy. Y cuando era niño, a menudo tenía que trabajar con
caballos, no había tractor en casa del vecino. Y me encantaba ir con los
caballos y ver como dos caballos que no se caían bien se acercaban demasiado. Una
yegua se fue y la otra realmente consiguió uno. Estaba calzada, y dejó una
herida abierta en su hombro con carne colgando.
En serio, si un caballo así tiene sepsis, muere
rápidamente. A pesar de todo, nadie llamó al veterinario, habría sido
demasiado caro. En cambio, la abuela entró en el granero, tomó una caja de
hojalata sucia, que todavía estaba en el granero. Lo abrió y dentro había
un ungüento casero con resina. Lo aplicaron en la herida y una semana
después el caballo estaba listo para trabajar nuevamente. La terrible
herida se curó sin ningún problema.
Poco antes de empezar la escuela, el perro del patio me
mordió profundamente en la pantorrilla. Pero antes, había intentado algo
con el perro. Y hubo el mismo procedimiento. Bueno, por favor, no lo
tomes a mal. Si veo una herida así en un niño hoy, voy al
médico. Pero nadie me llevó al médico en ese momento. Me untaron el
ungüento, me sanó. Esta pomada de resina, era omnipresente.
El punto culminante fue cuando el abuelo, de más de 80 años,
resultó herido. Siempre fue nuestra costumbre, los sábados tomábamos café
y tortas en casa de nuestra abuela. Aquí es donde se conocieron. Ese
sábado, el abuelo todavía estaba en el taller como suele hacer y estaba
terminando algo; y ya nos habiamos sentado en la cocina con el
café. De repente se abre la puerta, sale el abuelo del taller, se ha
deslizado, la mano en la cepilladora, en el cabezal de fresado. No se
cortó los dedos como suele suceder, pero cortó todo el músculo en la base del
pulgar. Era un corte enorme, sangraba terriblemente.
Aparece en la cocina y le dice a la abuela: “Madre, ahora
necesito el ungüento. Estaba sangrando mucho y nos quedamos impactados, por
supuesto saltamos: "¡Ahora mismo!" El médico de
urgencias. Otro dijo: "No el médico de urgencias, llévelo al
hospital, necesita ser cosido". Y el abuelo no entró en pánico,
mantuvo la calma. Me dijo: “¡No, no! No hace falta que llames a
nadie, porque no me subiré al coche. Y en ese momento vino la
abuela; ¿Sabes lo que tenía en sus manos? Y pensé que tenía que
prevenirlo, porque estaba claro para los caballos, pero ¿para los humanos?
Pensé que si tenía sepsis, envenenamiento de la sangre,
estaba muerto. Un viejo así no puede hacer eso. Pero no pudimos
detenerlo. Puso el ungüento en la herida y después de 14 días la herida
había sanado sin complicaciones. No lo puedo creer !
Y eso es lo que le dije al maestro. Dije: ¿La gente
tenía un mejor sistema inmunológico y hoy estamos debilitados. Cómo es
posible? No hubo higiene en el cuidado de estas heridas. Entonces me
dijo: "¿Tienes la receta?" Yo: “Claro que tengo la receta,
porque mi mujer es farmacéutica y también del lado de la
naturopatía. Solía hacer ungüentos y todas estas cosas. Ella lo
aprendió. »
Siempre he sido incrédulo. Cuando me lastimé, corrí a
la farmacia. Usé la pomada para animales, pero compré Betadine y Merfen en
la farmacia cuando me lastimé.
Le dije eso para que no sospechara que estaba en el camino
equivocado. También le di la receta, al gran maestro.
En la próxima reunión, dijo: “Erwin, es algo especial con la
resina. “Imagina, miramos la resina de alerce de la que estás
hablando. Y esta sustancia mata bacterias, hongos y virus en mayor medida
(es decir, mata todos los patógenos) que cualquier otro fármaco disponible en
la industria farmacéutica. »
Max, eres el gran especialista en medicina
tradicional. ¿Entrenas médicos y dices eso? »
Él dijo: “Erwin, así son las cosas. Y te digo algo más: esta receta que ha
encontrado la naturaleza es tan compleja que no podemos recrearla
sintéticamente. No es un truco para hacer negocios. Esto no
funciona. ¡Pero es muy efectivo! Yo: “Max, en mi aserradero, nuestro
negocio creció durante ese tiempo y como ya nadie hace luna, construimos
nuestro propio aserradero, hay suficiente resina de alerce. En una hora,
ya tengo un balde lleno. Lo hago como Panoramix en Asterix y Obelix, lo
pongo en un balde y todos reciben el ungüento, es genial. ¡Podemos ayudar a
personas así! Me escuchó y me dijo: “Escucha, te vas a quedar sabiamente
con tus casas de madera" “Si crees que vas a entrar en una estrategia
comercial de la industria farmacéutica, no estarás contento. ¡No te
aventures allí! »
Entendí este buen consejo de inmediato y me dije: “Ya tuve
una pelea así detrás de mí. Y yo dije: "Entonces, ¿qué
hacemos?" Me dijo: "Me contaste la historia de los japoneses: el
conocimiento se puede transmitir".
Luego escribimos la receta de la pomada de alerce en el libro "Medicina
alternativa del árbol" .
No te lo puedes imaginar, sucedió exactamente lo mismo que con Moonwood en ese
entonces. Tengo mi propio registro en casa, y hay que decirlo para salvar
el honor de los médicos de todas las tendencias, que me han enviado informes de
sus experiencias con el ungüento:
Una otorrinolaringóloga de Múnich me escribió: Tiene una
gran consulta en Múnich y por primera vez pudo curar por completo una micosis
persistente en el oído.
Recibí una carta de un cirujano. Opera todos los días y más del 90% de sus
pacientes tienen una curación satisfactoria. Casi el 10% tiene
problemas. Puede solucionar casi todos ellos con esta
pomada. ¡Imagina eso! ¡Y de eso se trata! No se trata de ir a la
batalla ahora y luchar contra algo. Basta aceptar lo que se nos da día a
día. Te deseo todo esto con todo mi corazón.
Erwin Thoma
Ingeniero experto pionero y muy solicitado en el
campo del conocimiento de los árboles y la investigación de la madera. Nacido
en 1962, criado en Austria. Está casado, tiene 3 hijos
Formación de
guardabosques
En 1985 se convirtió en el guardabosques más joven de Austria al hacerse cargo
de una remota región montañosa del Tirol. Siguieron varios años de aprendizaje,
que lo llevaron a la industria forestal y la industria maderera en Europa.
Actividades
1990 Fundación de su propia empresa de transformación de la madera, empresa
pionera en la fabricación de construcciones de madera maciza.
1998 Fundación de su centro de investigación y desarrollo para la transformación
de la madera natural. El mismo año, presentación de una patente internacional
para un método especial de construcción en madera.
Diversos desarrollos lo han convertido en un reconocido especialista en madera
natural en toda Europa. Varias universidades europeas están interesadas en
sus desarrollos. Ha recibido numerosos premios por las casas que ha construido,
incluido el Premio a la innovación en Salzburgo y la única certificación Cradle
to Cradle Gold Class hasta la fecha para un material de construcción.
Erwin Thoma transmite su conocimiento en programas de televisión, conferencias
y nueve libros, cinco de los cuales son bestsellers. Sus libros han sido
traducidos a diez idiomas con una tirada total de alrededor de 500.000
ejemplares.
Los informes en Japón, EE. UU. y toda Europa lo ayudan a establecer una red
internacional con arquitectos, expertos en construcción y representantes de la
ciencia y los negocios.
https://nouveau-monde.ca/le-langage-secret-des-arbres/
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