© LA SEMILLA DE LA VIDA
Encarando el año de
la humanidad despierta
En silencio pero muy ufana la semilla ha empezado a abrirse
camino.
Da gozo asistir al milagro de la vida.
La Naturaleza, siempre abriéndose camino hacia adelante y
arriba, nos muestra el sendero de nuestro vivir: Confiado, perseverante,
comprometido, consciente e imperturbable
Se pone en marcha un nuevo año pero con un “guion repetido”.
Haría reír si no fuera algo tan serio y penoso. Nos quieren volver a pasar la
“función del virus”... ¡mira que llegan a ser tozudos!
¡Qué aburrimiento... máscaras, certificados, confinamientos... ya apestan!
Me parece que esta vez, por mucho que se empeñen, el trompazo
que se van a pegar será definitivo para que se den cuenta de que con la gente
no se juega.
Este año es el de la humanidad despierta y deseosa de vivir
libre y con dignidad y los cabezotas del socorrido deep state o poder oculto
tendrán que envainársela...
O van a trompazos o el “cuento del cóvid” hará aguas y los
ahogará a todos ellos, estúpidos sin mucha imaginación, sólo pendientes de
hacerse “inmortales”.
Vaya qué gracia que no nos los quitemos de encima... Si
todavía no jodieran y fueran sólo a su bola, hartándose de dinero, fama y
poder... ¡Buen provecho, pero a los demás dejadnos tranquilos!
Quizás sonará la flauta y acabarán encerrándose en unos
espacios privilegiados al margen de la sociedad y se dedicarán a sus orgías y
ritos más o menos satánicos.
¿No tienen suficiente con sus entretenimientos y no quieren
renunciar a tocar la pera del común de los mortales porque eso les proporciona
la adrenalina que no saben procurarse de otra manera? Pues aquí les esperamos.
Ahora que ya hemos visto de qué pie calzan les podemos parar
los planes de la forma más sencilla: PASAR TOTALMENTE DE ELLOS... Ni una
protesta, ni una petición, ni una maldición!!
Nosotros vamos a la nuestro: Vivamos, compartamos, amémonos
y disfrutemos de todo lo que nos rodea.
Al personal “davosense”, transhumanista y tocado del ala...
que les den morcilla: Con su pan se lo coman.
Tenemos el Universo a nuestro lado. El equilibrio, la calma,
la paz, el bienestar nos esperan en cantidades tan astronómicas que no nos las podremos
acabar.
O sea que arremanguémonos y a construir lo que queremos, lo
que nos gusta, lo que nos conviene como seres humanos que somos.
Que el corazón coja el timón de nuestras vidas y la mente se
quede quieta allá donde debe estar. Se acabó el desmadre y la desorientación en
que nos han ido metiendo.
Ahora toca respirar e ir paso a paso deleitándonos con todas
las maravillas que tenemos al alcance y que no veíamos de tan enturbiados que
estábamos
El año 2023 es el año de la reconstrucción humana, del
reencuentro emocional y espiritual que nos llenará de gozo y bienestar.
Bienvenidos todos los hombres y mujeres de buena voluntad
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Joan Martí – elcamidelavida@gmail.com
1 de enero de 2023
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