OSCILAR ENTRE LA ESPERANZA Y EL MIEDO
Por un lado, tenemos plena seguridad de que el Creador de toda vida ,
la Fuente de todo lo bueno, el Dador de la victoria y el avance está utilizando
la actual crisis mundial para hacer que la humanidad dé un giro, de la
oscuridad a la luz, para que pueda realizar una nueva creación en nosotros y a
través de nosotros. Esto es emocionante, inspirador y estimulante.
Imagine un mundo donde la fuerza suprema de todo mal, el antiguo dragón y la serpiente de antaño, haya sido eliminada de la Tierra, y la humanidad finalmente pueda respirar libremente, ya no oprimida por esta nube que todo lo abarca de perversión, maldad, muerte y sufrimiento. ¡Cuán indescriptiblemente maravilloso será eso!
Por fin todo lo bueno y maravilloso podrá brotar sin obstáculos y florecer abundantemente, dando frutos curativos para toda la humanidad, sin que los malvados criminales lo desarraiguen antes de que haya comenzado a crecer.
En qué paraíso
se convertirá el mundo, una vez que este sistema mundial de intenso mal sea
eliminado, y el bien pueda finalmente comenzar a restaurar todo lo que está
roto en la Tierra, generando un futuro para la humanidad con el que nadie se ha
atrevido a soñar.
Ésa es la brillante esperanza que tenemos, al comprender los
tiempos en los que nos encontramos, en los que el mal finalmente está quedando
al descubierto y aumentan las señales de que un nuevo mundo está a punto de
surgir.
Manifestación extrema del mal.
Pero ,
por otro lado, vemos cómo esta misma fea fuerza de destrucción y tiranía, los
oscuros demonios de las mazmorras, están surgiendo de las profundidades del
abismo y se manifiestan masivamente en todo el mundo, de maneras que nunca
creímos posibles. Si se salen con la suya, la Tierra será peor que el mismísimo
infierno.
Imagine un mundo en
el que no se le permite hacer, decir o incluso pensar NADA que no esté en línea
con lo que los gobiernos exigen que piense, diga, sienta y haga.
En el momento en que te desvías de su locura enfermiza, como
la promoción de LGBTQA+, la normalización de la pedofilia, obligar a los niños
pequeños a tener relaciones sexuales, destruir todos los alimentos saludables y
obligar a todos a comer insectos transgénicos de una fábrica, imponer
inyecciones letales a todos varias veces al año. - Vendrán a por ti.
Cada vez que quedas
atrapado por la omnipresente nube de IA, que monitorea tus propios pensamientos
y sentimientos, puedes ser tratado como un terrorista interno o una amenaza a
la seguridad nacional.
Ésa es literalmente, sin la menor exageración, la sociedad que los globalistas están estableciendo actualmente en todo el mundo. Registra todos los pensamientos y sentimientos, y cualquiera que no piense como quiere está en serios problemas. No creáis que no podrán hacerlo, que ya lo están haciendo masivamente a nivel mundial.
Las tecnologías de control mental se están implementando en ciudades
de todo el mundo, como se puede ver en el documental 'EL FIN DE LAHUMANIDAD'.
Ya en los últimos años hemos visto a muchas personas arrestadas por publicar algo en las redes sociales que no estaba en línea con la tiranía gubernamental. Innumerables médicos perdieron su licencia, fueron multados y despedidos de sus puestos, simplemente porque trataron con éxito a pacientes pandémicos. Eso no estaba permitido, ya que había que engañar a la población mundial haciéndole creer que no había tratamientos, por lo que todos harían cola para recibir una peligrosa inyección experimental, que es potencialmente letal. Ésa es la sociedad que estos demonios están construyendo a nuestro alrededor, mientras hablamos.
La Organización
Mundial de la Salud está siendo reestructurada para convertirse en una
dictadura mundial eficaz, cada vez que proclamen la próxima plandemia y asuman
plena autoridad sobre todas las naciones del mundo, para imponer censura,
arrestos, cuarentenas forzadas, inyecciones forzadas, etc.
Esta es la realidad. Está sucediendo ahora.
Usted expresa una
preocupación honesta por estos acontecimientos y la policía está a su puerta. Estos son
sólo pequeños atisbos de un mundo que están preparando y que es peor que las
peores películas que jamás hayas visto, y no bromeo ni exagero.
Mientras hablo, se están desarrollando tecnologías para
convertir a cada ser humano en una batería viva donde el latido de nuestro
corazón y nuestra respiración crean energía para alimentar la red mundial de
vigilancia y control de IA. Esto es posible gracias a la dispersión masiva del
óxido de grafeno, que se introduce en el organismo de miles de millones de
personas a través de vacunas, chemtrails, agua, alimentos, suplementos,
pañales, productos femeninos, chocolates, etc.
Imagina que tú mismo
eres la fuente de energía para sostener el mismo sistema que te está
esclavizando, y no hay nada que puedas hacer al respecto, como sucede en lo más
profundo de cada célula de tu cuerpo que está empapada de óxido de grafeno...
Lo que
se está desplegando en este mismo momento en todo el mundo es diabólico sin
comparación.
En muchas naciones, millones de personas ya han sido
obligadas a ponerse en cuarentena, donde fueron inyectadas a la fuerza contra
su voluntad. A millones se les prohibió el acceso a sus propias cuentas
bancarias porque no obedecen los devastadores mandatos. Conocemos la tiranía
diabólica que estalló durante la primera plandemia. Millones de personas fueron
golpeadas hasta sangrar, y muchas fueron transportadas al hospital, con heridas
potencialmente mortales, infligidas por la policía, porque caminaban
pacíficamente por las calles, expresando su deseo de justicia. Vea
nuestra descripción general de la tiranía pandémica.
Cuando reina
el infierno, la policía se convierte en la fuerza de trabajo de los peores
demonios del infierno, quienes obedecerán ciegamente e incondicionalmente las
órdenes más inhumanas, porque para eso se inscribieron: ser sirvientes
incondicionales de quien tenga mayor rango. Si resulta que se trata de un
criminal despiadado, cada oficial de policía se convierte en la extensión de
este criminal.
Haremos un mundo mejor
La omnipresencia
del mal puede ser abrumadora y quitarnos todo el coraje y la esperanza. Pero
debemos entender que esa es su estrategia: poner todo el foco en el
problema, lejos de la solución. Porque ¿cuál es la solución?
¡Tú y yo! Somos
nosotros quienes cambiaremos las cosas en este mundo.
Esto puede sonar extraño para algunos, ya que la religión
nos dice lo contrario: espera a que el cielo arregle todo y tú simplemente
espera y aguanta. Pero esa es una mentalidad falsa y es la razón misma por la
que hay tanta maldad en el mundo. Encierra a las personas buenas en un modo de
espera perpetua y les da rienda suelta a los malvados.
Entender que la
Tierra fue entregada al hombre. No a los ángeles. El Creador nos dio esta
creación a ti y a mí, por eso tenemos la responsabilidad y la bendición de
protegerla y salvarla de la destrucción.
Pensar que
simplemente debemos esperar a que Dios, Cristo, el Mesías o algún Instructor
del Mundo lo haga por nosotros, es un camino seguro hacia la destrucción total.
(Ver el
Retorno de Cristo ). Nosotros somos los creados para ser gobernantes y
guardianes de este hermoso mundo. La corona está sobre nuestra cabeza. Tenemos
la responsabilidad.
Es porque la gente buena ha entregado el
mundo a las garras del infierno, pensando que "no es nuestro trabajo
proteger el mundo", que los malvados han podido apoderarse de él.
Una vez que las personas buenas comprenden su misión e
identidad, ser guardianes y guerreros que establecen el amor, la justicia, la
bondad y la paz en la tierra, guiados por el Cristo que habita en nosotros,
entonces se acabó el juego para los malvados.
Los que sirven al mal tienen miedo de que se levanten los
buenos. Porque saben que no tienen ningún mandato, bendición o autoridad del
Creador. Los malvados hacen todo de forma ilegítima, basándose en el engaño y
el robo. Lo único que hacen es mentir y robar. Así es como
pueden gobernar el mundo.
Una vez que
expongamos sus mentiras y robos, estarán perdidos.
Nosotros somos los que tenemos el cetro. Llevamos la corona.
Tenemos la bendición de lo alto. Tenemos las huestes del cielo, los ejércitos
de billones de ángeles de nuestro lado.
Pero están esperando
que nos levantemos y recojamos nuestras espadas.
¿Que estas esperando?
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