© ES HORA DE DECIDIR QUÉ QUEREMOS
Nos lo estamos pasando muy bien estas fiestas y de eso se
trataba. Sigamos así, que todavía quedan días de jolgorio para poder acabar de
cargar las baterías e ir afilando bien la mente.
Preparémonos para hacer realidad la sociedad que queremos,
donde resplandezcan unos valores que nunca deberían haber desaparecido.
Me resisto a hacer la lista... que cada uno piense en los
que más le inspiren y den sentido a su vida.
Se trata de situar cada cosa en su sitio y guiarnos por una escala de valores que ponga la vida en lo alto, sostenida en la dignidad y la libertad humanas.
Hay que desbrozar el grano de la paja, hacer limpieza en
nuestras costumbres. Llenarnos de paz, optar por la sencillez bajando el ritmo
frenético en el que estamos instalados.
Contemplar, maravillarse... Hay mil motivos para un asombro
impresionante. Y lo más importante... hay 8.000 millones de razones para
relacionarse, para compartir goces, para intercambiar dones, para expresar
sentimientos, para sentirse en familia, para vivir...
Las cosas materiales han ido ocultando las energías y los
valores que atesoramos. Apartemos el velo que las esconde y hagámoslas salir a
“trabajar” por nosotros y por los demás.
Busquemos en nuestro interior todas las potencialidades de
que disponemos y entreguémonos a ellas. Necesitamos creerlo para hacérnoslas nuestras
y así eliminar la causa de tanta impotencia entre los humanos.
Nosotros decidimos: ¿Queremos sufrir o ser felices? ¿Vivir
en paz o angustiados?
Una vez tomada la decisión y manteniéndola, el universo -la
Vida- hará su trabajo y nosotros seremos los beneficiarios.
No es tan difícil, basta con “dejarse llevar” con plena
confianza.
Yo confío en la Vida por qué sé que me quiere... y lo
constato continuamente viendo cómo no escatima esfuerzos para mantenerme vivo,
sin pedir nada a cambio.
Y, si además, le hacemos confianza, la energía y la
protección se multiplica exponencialmente.
¡Vamos pues!
VIVA LA VIDA
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Joan Martí – elcamidelavida@gmail.com
29 diciembre 2022
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