Sabes que este mundo tiene razones suficientes para saltar por los aires. Pero no ocurre nada.

NUNCA PASA NADA

Cada noche, cuando termina la jornada laboral, te conectas a estos blogs y webs de pensamiento “alternativo”, tratando de encontrar una pista, un indicio que te ayude a comprender el signo de los tiempos. Sabes desde hace mucho tiempo que no piensas como los demás; Que ves las cosas de manera diferente. Te exiges más que a nadie, porque esperas algo más de la vida. Pero ese algo lo tienes que buscar en las pequeñas cosas, porque no terminas de ver el cambio que ansías.
Así que aquí estás, cada noche, cuando termina tu jornada laboral, o cuando tienes un rato libre, quizá en fin de semana, o en la compañía de un buen café… Un rato para ti, que no sabes cómo emplear mejor que estando relajado y viendo noticias que no encontrarás en los medios de comunicación habituales y adulterados.
Acudes a estos blogs porque, tengan una mayor o menor dosis de razón en sus planteamientos, al menos están menos contaminados que el resto de los “mass media”. Y, como sabes que eres diferente, quieres leer cosas distintas, pensar de manera heterodoxa… Pides tu ración de dignidad en forma de caracteres en una web que para muchos dice tonterías, sabiendo tú que posiblemente esas “tonterías” algún día pueden convertirse en una realidad sorprendente, aunque nos de miedo que se presente ante nuestros ojos. Pero nunca pasa nada.

Sabes que este mundo tiene, bajo tu punto de vista, razones suficientes para saltar por los aires. Los datos, el sentido común y las pruebas que te rodean así lo dejan claro. Pero por alguna extraña razón que no alcanzas a comprender, no ocurre nada de aquello para lo que “algo” te está preparando.
El Sol podría acabar con nuestro concepto de vida. Pero no ocurre nada.
La virulencia y regularidad con la que la Tierra mueve en forma de terremotos, es alarmante, y no obstante, el gran cambio no termina de ocurrir.
La crisis económica es sistémica y afecta al planeta entero. Las nacionaes más fuertes y poderosas están colapsando financieramente y las cifras lejos de apaciguarse, empeoran cada mes. Pero, tampoco el sistema materialista-capitalista y liberal que a todos nos está esclavizando, termina de caer.
La política no sólo no te convence, sino que desconfías de ella y la temes a partes iguales.
Sientes que el sistema policial que nos rodea, en lugar de protegernos, está diseñado o ha virado de forma que ahora nos vigila e incluso nos amenaza. Cuando eras pequeño sabías que si te perdías debías acudir a un agente de policía en busca de ayuda. Ahora, si ves un coche de la policía cerca de tu vehículo, no sólo no te sientes más seguro sino que, como ciudadano, no quieres problemas, ni que te pongan una sanción porque sus sueldos aumentan en directa proporción a las multas que aplican a la ciudadanía.
Y cada noche regresas a tu rincón de pseudoanonimato frente a tu ordenador (que no es nuevo, ni caro, pero que te da el apaño más que dignamente) y te relajas mientras ahí fuera se queda el ruido, la prisa y la ansiedad de quienes no entenderían jamás tu forma de pensar.
Tienes tanto miedo de tener razón en tus teorías como de no tenerla.
Si algún día te sales con la tuya y pasa algo de lo que crees que va a pasar, es que todo habrá cambiado para siempre, y no estás seguro de que lo que venga después sea nada agradable, ni seguro, ni placentero para los tuyos. Para los que te importan.
De modo que, aunque sabes que en el fondo tienes razón en lo que piensas, no te atreves a querer llevarla porque el resultado final bien podría ser peor que la decadencia en la que vives.
Pero miras a tu alrededor y sabes (o deseas) que un cambio se avecina. Aunque en muchas ocasiones el modelo agonizante se resiste a colapsar del todo e incluso parece dar señales de alta resistencia. Y pierdes la esperanza, y no sabes que pensar, y te vuelves a acostar otra noche más esperando que ese gran cambio se abra frente a ti, pero que no sea brusco (como si los grandes ciclos que se acaban lo hicieran de manera pausada alguna vez…).
El caso es que de nuevo, otra noche más, revisas la “otra actualidad” que nos rodea y que no verás en el telediario de la televisión de las masas. Y día a día, este 2012 que promete cambios de eras enteras, va pasando.
Quieres que el peligro te quede lejos, a ti y a los tuyos, y es normal. Eres humano y amas a los que te aman.
Pero al mismo tiempo deseas ese cambio; Ansías ese cambio; Necesitas ese cambio.
No sabes cuánto tiempo más podrás aguantar en un mundo en el que has de pagar por respirar, por dormir bajo techo, por alimentarte y por curarte en caso de que enfermes.
¿Llegará ese cambio?… Respuestas hay para todos los gustos. Por eso miramos al firmamento en busca de alguna señal, alguna anomalía.
Por eso analizamos la realidad con los ojos de quienes buscan algo que no se ve.
Seguiremos esperando y mientras tanto volveremos a estas páginas, a estos foros y estas webs, a modo de investigadores personales en búsqueda de no sabemos muy bien qué.

Los blogs, las páginas, los libros de autoayuda, los psicólogos, el coaching… cada vez existen más sistemas para ayudar a una gran cantidad de personas, que necesitan que cambie algo.

Esa necesidad viene dada por una sensación negativa de la realidad que nos rodea.

Lo primero que tenemos que hacer, es hacer consciente todo lo que no nos gusta:

Podemos tomar un papel e ir anotando las cosas de la vida que quiero que cambien.

Luego, podemos seguir escribiendo el diario futuro de un día perfecto, donde no se cambiaría nada.

Yo os digo, que el potencial para conseguir estas metas está en cada uno de nosotros. La única barrera que nos separa de conseguir lo que deseamos es nuestra INTENCIÓN Y COMPROMISO.

Un entrenador en coach, nos ayudaría a conseguir esto, y nos garantizaría el 100% de éxito en la empresa y el objetivo que nos embarquemos.

LA RESPUESTA ESTÁ EN NOSOTROS.

No podemos esperar a que el sol explote y cambie las cosas.

Las cosas las tenemos que cambiar nosotros, a nivel individual.

TENEMOS QUE SALIR DE NUESTRO ESTADO DE CONFORD Y DESALIENTO y coger aquello que deseamos, pero para eso se requiere un esfuerzo, una decisión, un compromiso, y nada más.

Una reflexión del alquimistadelaverdad.

http://maestroviejo.wordpress.com/