© RECUPERAR LA ESENCIA HUMANA
Ante la degradación y alienación en aumento del sistema que rige nuestra vida, toca plantearse una renovación total de nuestras costumbres y nuestro modo de estar en el mundo.
Hay que empezar desde la base y estructurar una razón que justifique nuestra existencia y ponga en valor nuestros dones y nuestras
capacidades.
Somos seres espirituales en una experiencia humana y hemos
de hacer honor a nuestra esencia. No es de recibo el ser juguetes ni “alimento”
de nadie.
Es un privilegio disponer de un alma (una conciencia) que
nos ofrece la posibilidad de contrastar nuestra forma de vivir, haciéndonos
sentir bien o mal según lo que hagamos.
El bienestar interior (la felicidad) es nuestra mayor aspiración en este mundo y solo se consigue cuando somos coherentes entre lo que hacemos y lo que sentimos.
En nuestros días el Sistema nos ha violentado en extremo,
forzando nuestro libre albedrío y alterando nuestra coherencia. El resultado es
un desquiciamiento emocional y físico.
Para restablecer nuestro equilibrio hay que salirse del
Sistema so pena de la aniquilación de la esencia humana por la pérdida de
nuestra alma.
El precio de esta decisión es altísimo, no cabe duda, pero
no actuar equivale a nuestra desaparición como seres humanos. Nuestra
responsabilidad y nuestra razón de ser es ejercer la libertad y la dignidad
ante cualquier situación que se nos plantee.
Rehuir nuestro papel en esta historia solo nos causará más
pesar del que ya padecemos a manos de nuestros opresores. Evidentemente cada
uno en su individualidad tomará el camino que crea más oportuno.
Como todo en esta vida cualquier opción tiene sus pros y sus
contras. La elección es libre y conlleva su carga de consecuencias
correspondientes.
Para empezar de cero, hemos de renunciar a todas las
“comodidades” y “placeres” de los que gozamos dentro del Sistema. A primera
vista es duro y complicado de realizar, pero el que algo quiere algo le cuesta.
Reconozco que un cambio tan drástico asusta y desanima, pero
hay que prescindir de TODO lo que nos ata al sistema si queremos crear un nuevo
estilo de vida donde los valores del espíritu sean prioritarios.
Quizá planteándoselo en etapas puede hacerlo posible,
contando que además existe el agravante de la ruptura con familia y amigos que
no compartan la visión.
Buscar un lugar y unos medios para conseguir la
autosuficiencia básica es el primer paso para luego ir creando comunidad y acceder
al bienestar físico y emocional.
Los primeros pasos serán los más duros pero la Vida estará
de nuestro lado ofreciéndonos sus opciones ocultas y sus compensaciones
impensables que nos harán llevadero el proceso.
Y si a pesar de todo no lo conseguimos y nos echamos atrás,
pues lo dejamos y no pasa nada: Lo habremos intentado y no nos quedará la
sensación de no haberlo probado.
Es mucho tiempo el que llevamos inmersos en un estilo de
vida “acomodado” aunque bastante estéril, envueltos de gran distracción y
entretenimiento.
Por ello no tenemos ni la más mínima costumbre de
autogobernarnos, caminar por nuestra cuenta y gestionar desde lo más simple a
lo más complejo.
Aparentemente lo tenemos todo en contra y el hecho de
resignarnos a “lo que hay” no nos parece tan catastrófico. ¿Es una batalla
perdida de antemano o hay espacio para actuar?
ESENCIA HUMANA
Joan Martí - 15.09.2021
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