¿VACUNAS PARA «HACKEAR» NUESTRO GENOMA?
Un fabricante de “coñavacunas” confiesa que su tecnología biogenética -su «Software de la Vida» como lo llama- necesita BURLAR los esfuerzos de nuestro SISTEMA INMUNOLÓGICO para funcionar como es debido.
Como supongo que sabéis, hace unos días ha dado comienzo la
campaña de “coñavacunación” aquí en España.
Concretamente, el gobierno está pinchando a los
voluntarios Comirnaty, la vacuna creada por Pfizer-BioNTech,
que utiliza una tecnología denominada de “ARN mensajero” (en adelante “ARNm”)
al igual que otras versiones de la competencia, como la “coñavacuna” de Moderna que
por lo visto llegará a nuestras fronteras para finales de mes.
Por lo que leo por ahí, el ARNm en sí no es ningún invento secuencial, sino que se encuentra en todas las células vivas de manera natural. La novedad, si acaso, es que el ser humano ya disponga de las herramientas y del conocimiento necesario para su fabricación artesanal.
Según parece, el famoso ARNm son fragmentos de código
genético que actúan como intermediarios químicos (de ahí lo
de “mensajero”) entre el ADN de nuestros cromosomas y la maquinaria celular
encargada de producir las proteínas. El ARNm es concretamente quien almacena
las instrucciones genéticas que dicha maquinaria precisa para fabricar tales
compuestos.
Aclarado a modo ilustrativo lo cual, en su página de
presentación Moderna alude a su biotecnología de ARNm con la
palabra “plataforma” (Plataforma de ARNm: Permitiendo el descubrimiento y el
desarrollo de medicinas]”) que, como bien sabréis la mayoría, es un término
ampliamente utilizado en el submundo del desarrollo de software.
Y si bien a simple vista podría parecer que el tratamiento
de “plataforma” se reduciría a una simple metáfora, cuando se
continúa leyendo, no obstante, uno se percata de que no:
Nuestro Sistema
Operativo
Reconociendo el vasto potencial de la ciencia del ARNm
nos lanzamos a crear una plataforma de tecnología ARNm que
funciona de manera muy parecida a como lo hace el sistema
operativo de un ordenador. Ha sido diseñado para que pueda conectarse y
funcionar con otros programas. En nuestro caso, el «programa» o
«app» es nuestro fármaco ARNm (que contiene la secuencia ARMm única que
codifica una proteína).
El ADN del receptor se usaría a modo de “disco duro” para almacenar las instrucciones
necesarias para crear nuevas proteínas. El ARNm haría entonces el papel del
“software”, que incluiría el listado preciso de “instrucciones” o de “comandos”
que las células necesitan para fabricarlas.
Y para cerrar el círculo de este invento –qué duda
cabe- secuencial, las proteínas serían finalmente los “programas”
que ejecutarían las funciones requeridas por cada célula. Como ya se ha dicho,
estas proteínas artificiales se crean a partir de ARNm prefabricado.
Para terminar su presentación, Moderna se acaba refiriendo a
su engendro sintético como el “Software de la Vida” nada
menos.
Pero claro, quien dice “Vida”, también dice “MUERTE”,
cómo no. Porque si con dicha tecnología (y el conocimiento adecuado) se
pueden llegar a controlar -como parece- todas nuestras
funciones vitales, pues ya me dirás. En tal caso, la única limitación
la dictaría el índice de maestría del “Dr. Frankenstein” de
turno sobre el funcionamiento del genoma humano al más bajo nivel. (Y pensando
en los MILLONES de años de VENTAJA que los jugadores
Secuenciales nos llevan en el área de la ingeniería GENÉTICA,
dudo mucho que nada de eso vaya a suponerles problema alguno).
Y continuando con la jerga informática,
aprovecho para decir que esta tecnología “ARNmarciana” tiene mucho
más de VIRUS TROYANO que de procedimiento genético-milagroso ninguno.
Solo así se explica que, después de instalarse este programa
en el host (con la “coñavacunación”) lo primero que necesite el
“corona-malware” sea BURLAR todos nuestros sistemas de defensa del
organismo como reconoce su creador:
Necesitamos que el ARNm llegue a los tejidos y células
mientras evade al sistema inmunológico
Pues ahí lo tenéis, el gobierno está siendo
cómplice de la inoculación masiva de un producto con la capacidad para DAR
o para COMPLICAR la vida del receptor en función únicamente de la
clase de instrucciones con las que se programe. ¿A
que mola?
Bueno, sea como fuere, ¿miedo a qué?
Si tu Destino es acabar inoculado con esa mierda y finiquitar como un perro sarnoso tu Misión, pues ¡muchas
gracias! -señores de Moderna o de Pfizer– por
su colaboración.
Pero si a tu Yo Superior se le hubiera ocurrido blindarte de
arriba abajo contra este tipo de atropellos, queda tranquilo, porque aunque te
pinchases 50 millones de dosis seguidas –y caducadas- te aseguro que te
levantabas de la silla y te volvías para casa sin enterarte.
¿Por qué creéis, si no, que NO existen
tratamientos farmacológicos totalmente eficaces para TODOS los
pacientes?
Pues porque, aun compartiendo idéntica base o “plataforma”
genética, cada Yo Superior PRECONFIGURA cada vehículo físico a
su CAPRICHO teniendo en cuenta las necesidades individuales de todas y
cada una de sus encarnaciones simultáneas.
En consecuencia, no hay “tontos” ni “listos”, ni
“iluminados” ni “borregos”, en esto de la “coñavacunación”, sino jugadores
con planes simplemente diferentes.
BIENVENIDOS A LA TIERRA
http://www.bienvenidosalatierra.com/arn-mensajero-para-hackear-nuestro-genoma/
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