LA HUMANIDAD DEJARÁ DE SER HUMANA...
La autodefensa se presenta de muchas formas, pero toda defensa de uno mismo empieza y termina con la disidencia, el incumplimiento, la desobediencia, el decir no a toda regla y el no permitir nunca la agresión contra el espíritu y el cuerpo; ya sea mental o física. Sin disidencia, la defensa no es posible, porque cuando el acatamiento voluntario es el comportamiento predominante, ya sea buscado, deseado o no, todos los mecanismos de defensa quedan efectivamente desarmados.
En otras palabras, el silencio ante la injusticia, la inmoralidad, el terror o la tiranía, crea una condición de debilidad, sumisión e irresponsabilidad, que son todos los forrajes de la indiferencia. Cuando no dices nada, cuando no dices que no, cuando no actúas contra el mal, cometes el mal.
Al no hablar, y al no responder, has hablado alto, y has cometido abiertamente un acto de cobardía. La culpa última no es sólo del agresor en estas circunstancias, sino también del que se esconde y calla.En "Más allá del bien y del mal", Friedrich
Nietzsche escribió: "El que lucha con monstruos debe tener cuidado de
no convertirse en monstruo. Y si miras a un abismo, el abismo también te mirará
a ti". Esta es una descripción exacta del fenómeno de convertirse en
lo que uno vive, así que si vives en un estado de indiferencia, ignorando el
mal que te rodea, aceptándolo para evitar el conflicto y la responsabilidad, te
conviertes en el mal que has elegido ignorar. El oscuro abismo en esta
circunstancia, es creado por tu propia inacción contra él.
A lo que nos enfrentamos como sociedad es a la amenaza más
tremenda jamás percibida o activa en la historia de la humanidad. ¿Te burlas de
esta declaración aparentemente "audaz"? Si es así, ya te has
engañado, y eres uno de los principales responsables de los enormes problemas
que proliferan en nuestro mundo actual. En lugar de que el Estado sólo busque
singularmente la guerra, la continuación del falso Sistema de la Reserva
Federal, la corrupción aislada del gobierno, el comunismo, el fascismo, o
cualquier asalto totalitario de amplia base sobre ciertos segmentos de la sociedad,
todos estamos siendo bombardeados desde mil direcciones diferentes a la vez con
todas estas atrocidades y muchas más, incluyendo ataques a nuestra libertad y
soberanía, a nuestras mentes y cuerpos, y a cada aspecto de nuestro ser.
Debido a los colosales avances de la tecnología, que en
muchos más sentidos de lo que parece se están utilizando contra nosotros para
construir un mundo literalmente transhumano dirigido por medios tecnocráticos,
nos enfrentamos a lo que podría considerarse un Armagedón tecnológico, en el
que todo el control sobre la humanidad quedará aislado en manos de los pocos
más poderosos. Aceptar esto, tratarlo como algo normal o eminente, es un error
de lo más fatal, y uno que podría determinar nuestro destino a perpetuidad.
Cuando la humanidad deje de existir en cualquier forma
natural, cuando el hombre y la mujer se conviertan en uno, cuando el
transhumanismo y el control mental sean realidades ineludibles, cuando la
perversión sea comúnmente aceptada, la presencia de la vida que todos hemos
conocido como mágica y una maravilla, habrá desaparecido. El mundo que se está
diseñando no es un mundo de amor, esperanza y sueños, es una pesadilla de
horror, y aquellos que persiguen esta caída del hombre ya han perdido todas las
características humanas. Son monstruos, así que debemos luchar contra ellos y
derrotarlos sin convertirnos nosotros mismos en monstruos.
Hay una razón por la que los niños, desde la infancia, son
objeto de adoctrinamiento por parte del Estado, drogas, productos químicos, inyecciones
de armas biológicas disfrazadas de "vacunas", propaganda insana,
distracción, perversión flagrante, y son alejados de la familia mental y
físicamente durante toda su vida. Esto, en sí mismo, si se permite que
continúe, garantizará la destrucción mental de múltiples generaciones futuras,
y eso asegurará una masa de trabajadores totalmente atontados, obedientes y
sumisos en el futuro. En ese momento, se habrá logrado el control total de la
humanidad por parte de los tecnócratas.
Aunque la tecnología tiene la capacidad de lograr muchas
cosas grandes, en manos de estos monstruos que buscan el control universal,
también puede utilizarse para destruirnos. Muchos se refieren a este fenómeno
tecnológico como "inteligencia artificial" (IA), pero no existe tal
cosa. Esta falsa terminología se está utilizando contra nosotros, ya que las
máquinas no son inteligentes, están programadas por la inteligencia, o eso se
cree. Cuando el hombre se convierte en una máquina, se acaba la verdadera
inteligencia, y el resultado es una sociedad programada de esclavos.
La IA se "define" como "la capacidad
de percibir, sintetizar e inferir información demostrada por los ordenadores, a
diferencia de la inteligencia mostrada por los seres humanos u otros
animales". La inteligencia se define como la capacidad de
aprender, razonar y comprender, por lo que la inteligencia honesta no puede ser
artificial, y las máquinas siguen siendo máquinas. La digitalización
transhumana del hombre significará el fin de toda la vida tradicional tal y
como la conocemos.
La mayor parte de esta sociedad, ya ha sucumbido a un mundo
digital, y confía en lo que falsamente se denomina "medios sociales"
como padre, familia y amigo, despreciando el estado natural de la comunicación
personal, el amor, el compañerismo, el debate y la grandeza de la naturaleza.
Llegados a este punto, el futuro no es tuyo, sino de tus amos. Toda privacidad
ha desaparecido, y la mayoría de las transacciones privadas y financieras se
capturan y se basan en datos. Todos los aspectos de la vida son rastreados,
utilizados, vigilados, restringidos, censurados, gravados y todas las
actividades imaginables requieren una licencia del Estado. Ya eres un esclavo,
te des cuenta o no.
La trama sigue desarrollándose, ya que las monedas digitales
controladas centralmente (CBDC) se están desplegando en todo el mundo, lo que
permitirá que la mayoría de todos los individuos estén totalmente controlados y
regulados. Esto dará lugar a restricciones masivas en cuanto a lo que se le
permite hacer, dónde se puede viajar, qué alimentos debe comer, qué atención
médica puede o no puede recibir, qué estipendio estatal se le asignará, cuánta
energía se le permitirá utilizar, y así sucesivamente. Todo en tu existencia
dependerá de la modificación del comportamiento; en otras palabras, haz lo que
te ordenen los gobernantes tecnócratas del Estado, o piérdelo todo, ya que toda
tu vida estará sancionada tecnológicamente.
Es imperativo comprender que todo lo que usted cree saber
sobre tecnología y avances tecnológicos, probablemente lleva como mínimo 20
años de retraso. Todos los supuestos nuevos descubrimientos y las nuevas
tecnologías reconocidas como tales, no son nuevas en absoluto. Lo que los
militares tienen ahora, y en lo que están trabajando hoy, es desconocido para
la mayoría, excepto para unos pocos en la cima de la pirámide del poder.
Entender y comprender este concepto, debería infundir miedo
en los corazones de los hombres. Internet, y por lo tanto, el internet de las cosas,
no fue descubierto e implementado por algún genio de la informática, sino que
fue diseñado y creado por los militares a través de la "Agencia Investigación Avanzada de Defensa". (DARPA) Llegar a este
momento terrorista en nuestra historia no fue un accidente, y fue
intencionalmente planeado hace mucho tiempo. Nos queda poco tiempo para detener
este infierno totalitario que se ha creado con el fin de destruir lo que
conocemos como la raza humana.
¿Seguirás sentado al margen, con los ojos cerrados, los oídos tapados y la boca cerrada, o te levantarás y defenderás tu libertad y tu vida, y la de tu familia? La única solución, como he dicho muchas veces, es la disidencia activa. Decir no al Estado, desobedecer, no acatar ninguna orden tiránica, y hacerlo como individuos en masa.
Nadie puede hacer esto por ti,
pero puede y debe ser hecho por muchos individuos independientes con mentalidad
de libertad. Pedirle a otro una solución para las masas como colectivo, no
tiene valor, y expone la apatía a un nivel que si es practicado por la manada
como ha sido durante tanto tiempo, el fin de la humanidad será seguramente
nuestro destino.
"¿Ha habido alguna vez una sociedad que haya muerto
de disidencia? Varias han muerto de conformismo a lo largo de nuestra
vida". - Jacob
Bronowski, Science
& Human Values
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