Muy pronto, el Poder Global impondrá la vacunación obligatoria al rebaño a través de sus perros de la OMS y del Ministerio de Sanidad. ¿Por qué? Por dos razones que no saldrán jamás en la prensa, pero ya se filtran como gas nervioso entre las ruinas del relato oficial.
La primera: necesitan conectar nuestras mentes a la Inteligencia Artificial, domesticar la especie hasta el punto de borrar la voluntad individual, para que ellos —los arquitectos del colapso— puedan vivir sin riesgos ni rebeliones. Y porque está escrito en la doctrina de la Torah: Ellos son los únicos humanos. Los goyim son ganado, animales sin valor.