LAS DUDAS DEL ALMA
Nadie sale del silencio igual que como entró.
No hay preguntas sin respuesta, sólo no hemos recorrido el espacio necesario para poder asimilar la información que está ahí pero no al alcance aún de nuestro entendimiento (consciencia) como caos que no podemos decodificar. Nuestro ruido interior suma más caos al caos.
El silencio es el inicio del recorrido por un vórtice energético cuyo movimiento (tiempo) necesario para que la expansión (consciencia) tenga lugar y el caos se transforme en amor, una frecuencia que nos conecta con la creación, la del universo y la nuestra.