30.1.24

Vivir es una aventura extraordinaria, un privilegio, un verdadero disfrute...

© EL GRAN PRIVILEGIO DE LA VIDA

- Quien tiene un “porqué” vivir, encuentra casi siempre un “cómo”

- No se trata de buscar el placer o el poder sino de buscar el sentido

- Lo verdaderamente humano es la capacidad de pensar y realizar un proyecto

- No hay que esperar algo de la vida, es la vida la que espera algo de nosotros

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¿Qué podemos sacar de práctico de estas sentencias?

De entrada hay que entender lo que nos quieren sugerir. Después habrá que ver si nos resuenan y, si es así, qué podemos hacer al respecto.

En estos tiempos totalmente carentes de valores auténticos, donde la bondad y el amor no tienen muy buena prensa y con todo el mundo bien desorientado, replantearse estas reflexiones puede servir para volver a encontrar la buena senda en nuestra vida.

Vivir es una aventura extraordinaria, un privilegio, un verdadero disfrute... Sin embargo, vivir pide implicación, compromiso, integridad, confianza.

Así que vamos con todas nuestras fuerzas y a ojos cerrados. Lancémonos de cabeza, con ganas, con ilusión, con osadía.

Nada ni nadie puede detener nuestro empuje, nuestra convicción, nuestro anhelo de gozar de esta oportunidad cósmica que nos ha sido dada. Sin dudas, sin miedos, sin perder el tiempo en disquisiciones inútiles.

A todos se ha ofrecido una ocasión única con la experiencia de la vida. Los condicionantes particulares que cada uno podamos tener son a la medida de nuestras capacidades y deben servirnos de estímulo para desarrollarnos en nuestro camino.

El gran juego de la vida tiene sus altibajos, sus curvas y algún susto pero está lleno de alicientes y maravillas a nuestro alcance. ¿Lo desaprovecharemos?

Ir desvelando sus misterios, compartiendo la emoción de los descubrimientos con otros es un programa suficientemente atrayente para no menospreciarlo.

En potencia lo tenemos todo, sólo hace falta írnoslo haciendo nuestro con constancia y gratitud. Abrir los ojos cada mañana es la señal renovada del camino en el que estamos que nos puede llevar a donde queramos.

Que las mil distracciones que nos rodean no nos hagan perder de vista el milagro que supone estar vivos y sensibles a todo lo que se nos ofrece.

O así me lo parece. 

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Joan Martí - elcamidelavida@gmail.com - 30 enero 2024

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