11.7.22

En estos momentos de temor y desorientación, es cuando toca centrarnos en lo básico

© EXAMEN DE CONCIENCIA (La Ley Natural)      

Una buena forma de disolver el ambiente enrarecido -producto de las maniobras del 1%- es darse cuenta y asumir los poderes y derechos naturales que todos y cada uno de nosotros atesoramos.

Sólo el Creador es nuestro interlocutor, nadie en este mundo está por encima de nadie. Todo se basa en el voluntario consentimiento y el libre albedrío.

Nadie puede imponer nada a otros. Todo el mundo es soberano de sí mismo y comparte con los demás habitantes de la Tierra la responsabilidad sobre todo lo que en ella ocurre. Todo es de todos.

Hasta aquí la única verdad. ¿Pero con qué nos encontramos en realidad?

Que hemos renunciado a nuestra idiosincrasia, a nuestra esencia trascendental y nos comportamos de forma sumisa por el temor y la ignorancia. Tal vez también por la pereza…

Somos el resultado de un lavado de cerebro de siglos que en cada época ha utilizado diferentes métodos pero siempre con la misma finalidad: Desactivar nuestro poder de forma continua.

El aniquilamiento resultante dificulta la puesta en marcha de nuestras potencialidades y derechos inalienables que siguen dentro de nosotros dispuestas al requerimiento de hacerlas evidentes y entrar en acción.

Ante todo debemos vencer el miedo que nos da nuestra propia luz... y la verdad. Superado este trámite sólo necesitamos dejarnos llevar sin distraernos.

Que ningún canto de sirena nos aparte de nuestro camino. Que ninguna tentación mundana nos estorbe de nuestro sendero espiritual. Que nuestro paso por esta realidad deje una estela provechosa.

Si es necesario marcarnos algún objetivo de vida, que se sustente en la bondad y la alegría. La buena vida debe ser divertida, compartida y agradecida.

En este mundo hemos venido a experimentar tanto lo bueno como lo malo pero en definitiva hemos venido a ser felices... y hay muchas formas de serlo.

Debemos tener muy claro este objetivo maestro y enfocar nuestro vivir en esta dirección siempre teniendo presente que somos nosotros los que nos creamos nuestra realidad, o dicho de otra forma:

Nosotros materializamos nuestros pensamientos, deseos y creencias que van configurando nuestro día a día.

En estos momentos de temor y desorientación, es cuando toca centrarnos en lo básico, contando plenamente con todo aquello de lo que hemos sido equipados y que nos permite definir nuestro vivir y nuestra proyección conjuntamente con todos los seres humanos conscientes.

Que así sea.


LA CONQUISTA DEL PARAÍSO

------------------------------------------------------------------------------

Joan Martí – elcamidelavida@gmail.com

11 julio 2022

No hay comentarios:

Publicar un comentario