22.8.20

Que nadie diga que no me importan las vidas. Me importa la situación en su totalidad

CONTRA EL CONTAGIO DEL MIEDO                           

Cualquiera que piense que el distanciamiento social es una buena idea para los próximos años, o piense que una dictadura "benevolente" es para el bien del pueblo, ¡buena suerte con eso!

Soy un ser humano libre y soberano y si quieres quedarte en casa, quédate en casa. Ese es tu derecho soberano a elegir.

Si quieres usar una mascarilla, usa una mascarilla. Ese es tu derecho soberano a elegir.
Si quieres evitar grandes multitudes, evita las grandes multitudes. Ese es tu derecho soberano a elegir.

No estoy obligado a caer en la pobreza por ti. 
No estoy obligado a abstenerme del contacto humano por ti. 

No estoy obligado a comprar solo, sin mis amigos y mi familia, por ti. 
Me niego a participar en la "vida de cuarentena" hasta que haya una vacuna insegura y no probada que se distribuya en dieciocho meses. 
Me niego a recibir dicha vacuna para que otros se sientan más seguros. 
¡¡Ese ES mi derecho soberano a elegir!!

Si estás convencido de que la vacuna es segura y efectiva, disfruta de ella.

Algunos de vosotros estáis permitiendo que el miedo y las políticas carentes de datos científicamente precisos destruyan nuestro país y arruinen nuestras vidas. No puedo controlar vuestro comportamiento autodestructivo, pero todos tenemos algo que decir en el país y el planeta en el que vivimos. Necesitamos decirles a los legisladores que exigimos opciones. Tenemos el derecho constitucional de tomar riesgos. La vida está llena de bacterias y virus, muchos de los cuales se propagan antes de que los síntomas se manifiesten y después de que disminuyan. Tenemos el derecho soberano de recibir vacunas o de rechazarlas.

Los datos son inexactos en el mejor de los casos; exagerados a propósito para justificar los abusos del gobierno en el peor de los casos.

Deje de permitir que el gobierno destruya:

- el suministro de alimentos
- los pequeños negocios
- la autonomía médica
- el acceso a la atención primaria
- las reuniones religiosas
- el derecho a la privacidad
- nuestra salud mental
- nuestra libertad

Cuando la "nueva normalidad" esté llena de hambre, depresión, suicidio, abuso infantil, violencia doméstica, encarcelamiento, espionaje gubernamental y pura DESESPERACIÓN, el virus va a parecer preferible al mundo que ayudaste a construir.

Aquellos que dicen que yo (o cualquiera que apoye la idea de volver a abrirnos) estoy poniendo la economía por encima de las vidas (como si el virus matara, pero el hambre no) que presten atención:

- No te importa que la gente se mate por falta de esperanza...
- No te importan los pequeños negocios que cerrarán sus puertas (su vida) permanentemente
- No te importan los niños, mujeres y hombres que serán víctimas de abuso doméstico.
- No te importa que la gente deje de pagar sus hipotecas y sean deshauciados de sus casas.
- No te importa que las facturas no sean pagadas por familias con ingresos cero ahora mismo.
- No te importa que la gente se pregunte de dónde vendrá su próxima comida.
- No te importa la gente que perderá su sobriedad y volverá a la adicción.
- No te importa la gente que morirá de hambre... (Apoyas el inevitable saqueo que tendrá lugar)
- No te importa nadie que haya sido asesinado mientras más tiempo dure el confinamiento
- No te importa la salud mental de la gente
- No te importan los niños que sí necesitan maestros y referentes que los guíen y los eduquen.
- No te importa que la economía se derrumbe a nuestro alrededor.

REALMENTE NO TE IMPORTA.

Te encantan tus grilletes. Eres patético, rogando a tus líderes por MÁS confinamiento y MÁS regulaciones.

No toleraré que otra persona me diga que no me importan las vidas. Me importa la situación en su totalidad. Pero a ti no te importa nada de eso, así que...

TÚ te quedas en casa.
TÚ usa una mascarilla.
TÚ vive con miedo.

Es tu elección sobrevivir como una rata.
Yo he elegido VIVIR como un ser humano.


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