30.4.25

El apagón no es un fallo: es una prueba de obediencia, como la plandemia de opereta

MALDITOS HIJOS DE KLAUS          

Apagón. España a oscuras. Portugal en silencio. Francia con cara del gato que se comió al ratón. Las redes sociales, fundidas. Y el ganado, balando en la oscuridad digital, temblando ante el espejo negro de su propia insignificancia profunda.

¿Causa oficial de la UE? “Ciberataque ruso”. Fuente: las mismas cloacas que vendieron mascarillas por decreto y vacunas por chantaje. Las emisoras del Régimen. Los teloneros de la OTAN.

¿Habré de decir lo obvio? Es otro teatrillo. Otro puñetero ensayo general. Esta vez, la OTAN no ha tenido que volar un gasoducto. Ha sido cosa de pulsar un par de interruptores.

29.4.25

Sin que suponga 'dar el brazo a torcer' nos conviene algo de tregua, de paz

© CUESTIÓN DE SUPERVIVENCIA

Necesitamos tener los pies en el suelo y replantearnos muchas cosas: creencias, aspiraciones, compromisos, necesidades, valores... Tenemos que lidiar con las circunstancias que nos rodean y por eso hay que ser realistas y pragmáticos.

Si echamos un vistazo a nuestra situación, salta a la vista el desconcierto en el que estamos sumidos y que nos provoca desorientación e impotencia a la vez que contradicciones anímicas.

Tenemos unos principios, una conciencia de la vida, que nos han llevado a una disonancia cognitiva con la forma en que el mundo parece desarrollarse.

24.4.25

Investigando esta historia, me vi arrastrado a un laberinto muy profundo y complejo

SIMULACIÓN DE UN MUNDO CONSCIENTE

¿Qué pasaría si alguien creara un avatar digital tuyo y lo colocara en una enorme base de datos de simulación... y tú no supieras nada sobre eso?

¿Cómo te sentirías al respecto?

Sí, mientras usted es felizmente ignorante e inconsciente y simplemente continúa con su vida normal, su “yo simulado” ahora también continúa con su propia vida en un entorno global simulado con la mayoría de los otros ocho mil millones de personas dentro de un planeta Tierra simulado.

Bueno ¿Y si dijera que esto ya ha pasado?

23.4.25

Hará falta audacia y perseverancia, pues no hay otro camino hacia la libertad

¿HUIR O LUCHAR?                                    

En este mundo donde la red de control tecnológico se extiende por todas partes, cada rincón del planeta parece ahora bajo vigilancia, cada individuo escudriñado, cada transacción observada. Los Estados, habiéndose convertido en actores globalizados de la tiranía, parecen estar fusionándose en una burocracia despiadada, impulsando un mercado interminable hacia la esclavitud. La Unión Europea, presentada como un bastión democrático, no es más que un espejo distorsionado de esta realidad omnipresente basada en una tecnocracia invisible, pero muy real. 

La moneda digital, lejos de ser un simple medio de intercambio, se está convirtiendo en la punta de lanza de esta dominación insidiosa. El pasaporte, que en su día fue una herramienta de libertad, se está transformando en una prisión digital, una barrera invisible que se interpone entre nosotros y el mundo exterior. Entonces ¿dónde buscar refugio? Huir a otro lugar ya no es una solución.

22.4.25

A través de estas pruebas de crisis, deconstrucción y transformación nacerá el milagro

DEL CAOS NACE LA REVELACIÓN            

Cuando el mundo se tambalea, cuando se resquebraja bajo el peso de sus contradicciones, de sus ilusiones y de sus sistemas desconectados de la esencia de la vida, es entonces cuando el alma humana se eleva en todo su esplendor. En este aparente caos, donde todo parece derrumbarse, las crisis actúan como una matriz de despertar, una fase de gestación necesaria para el surgimiento de una nueva conciencia, primero individual y luego colectiva. 

Estas crisis son el abrazo doloroso pero necesario que precede al nacimiento de un ser más despierto, más conectado con su verdadera naturaleza divina. Como el alquimista que, en el crisol de la materia, transforma el plomo en oro, las pruebas colectivas e individuales que vivimos de modo cada vez más cercano e intenso, a pesar de su dureza, son en realidad fabulosas oportunidades de transmutación. 

15.4.25

Una verdad inquebrantable. Aprovéchenla mientras aún exista la oportunidad de actuar

HAY UNA SOLUCIÓN PARA ESTE MUNDO

Y TODOS SABEMOS CUÁL ES

Si lo posponemos constantemente, siempre encontramos una razón para no buscar esa solución. Para explicarnos por qué "no se puede hacer". En muchos casos, desperdiciamos horas de energía creativa convenciéndonos de que "simplemente no es posible".

Verán, el mundo y el cosmos han entrado en la realidad cuántica. Bueno, no exactamente "entrado", siempre han estado en ella, pero nos hemos convencido de que ese no es un lugar al que los humanos pertenezcamos.

“No”, nos decimos. “Sólo podemos hacer y ver las cosas en segmentos tridimensionales y progresiones o regresiones lineales”.

14.4.25

No hay tiempo para enojos o indignación. Debemos desaprender la comodidad artificial

LAS COSAS BUENAS LLEGAN PARA QUIENES ESPERAN...

Actualmente vivimos al final de una era que podría liberar al mundo entero. No es un simple ciclo el que se cierra, sino una estructura entera que se derrumba, lenta y metódicamente, como un coloso hueco golpeado sobre su talón de arcilla. Los pilares de la modernidad occidental, que creíamos inquebrantables, se están resquebrajando en un silencio mediático ensordecedor.

El trabajo se vacía de su sentido, la política se reduce a la contabilidad del miedo, la cultura se transforma en un circo decadente y subvencionado, la justicia se imparte en nombre de la ideología de un pequeño grupo de degenerados y no de la ley. La seguridad ha desaparecido de nuestras calles. Más de un tercio de la población del país es de origen inmigrante y, sin embargo, nos llaman racistas.

11.4.25

Ante cada situación, todo el mundo puede intentar actuar de la mejor forma posible

LA LIBERTAD, EL ESFUERZO Y LA FELICIDAD     

El hecho de que sean libres obliga a las personas a esforzarse por encontrar su propia felicidad.

Puede parecer una paradoja, eso de que la libertad y las obligaciones vayan de la mano, pero no lo es: es precisamente gracias a que son libres, que las personas están obligadas a hacerse responsables de sus actos.

Si no fueran libres, su felicidad dependería de algún agente externo. Pero no es el caso: son libres, y lo son de forma inherente –la libertad es una de sus características connaturales–, y es por virtud de esa libertad que su felicidad depende de sus comportamientos.

10.4.25

Ser libre es solo disfrutar del hecho de ser... y dejar de complicarse la existencia

LIBERARSE ES UNIRSE                                 

A aquello de lo que nos creemos separados

Ser libre no significa ser distinto a los demás. Tampoco significa sentirse lejos de nada. Liberarse no significa comportarse de forma original, hacer cosas nuevas, inventar un mundo distinto. La libertad no tiene que ver con el aislamiento: construir fronteras y burbujas es algo menos que liberarse.

Ser diferente al resto no nos hace libres, en cualquier caso nos hace personas. Somos quienes somos y nada puede evitarlo. Por qué deberíamos querer reivindicarlo, puede verse a simple vista que todo el mundo es singular, único, diferente. La libertad y nuestras peculiaridades se asemejan tanto como la espiritualidad y la ensalada.

9.4.25

Al darte cuenta, te entregas, dejas tus objetivos personales, y te diriges al otro lado

EL VIAJE DE REGRESO                           

El viaje de regreso comienza el día que decides no alejarte más de la vida, de quien eres, y te comprometes a hacer el esfuerzo de acercarte de nuevo al origen de dónde vienes, a la realidad que todavía eres, a la conciencia que vive en tu interioridad.

El regreso puede empezar en cualquier momento. No sucede en un sitio determinado ni depende de nada en particular. No puede preverse. Sencillamente acontece, de repente y sin previo aviso, y tiene lugar en el preciso instante en que uno se da cuenta que el destino no es otro que el origen.

8.4.25

Todos tenemos derecho a saberlo: las claves de la eternidad están en el aquí y ahora

TENEMOS DERECHO A CONOCER LAS REGLAS DEL JUEGO

Hay un derecho básico que tenemos como humanos y es el derecho a saber que después de esta vida hay otra, y que esta otra vida será de una forma u otra en función de lo que hacemos en ésta.

Saber esto es básico, porque se trata de una de las principales reglas del juego, y es evidente que saber cuáles son las reglas del juego es imprescindible si de lo que se trata es de jugar.

De la misma manera que para poder jugar a un juego necesitamos saber cuáles son las reglas, para poder vivir debidamente debemos saber cuál es el sentido de esta vida que vivimos

7.4.25

De forma natural, todos tenemos la capacidad de discernir entre la realidad y la mentira

LA REALIDAD Y SU SENTIDO          

A veces, parece que la ciencia se haya convertido en una nueva religión. Quizás es que el procedimiento científico crea dependencia. No sé exactamente, en todo caso, ya hay quien se niega a reconocer que la verdad puede ser conocida de manera directa, sin intermediarios, y que la experiencia vivida no es suficiente para tener criterio o discernimiento.

Hay quien trata la realidad como si ésta no tuviera sentido salvo cuando demuestra tenerlo, o peor aún, cuando una teoría le aporta. Ha llegado el día en que parece que son las teorías lo que da sentido a las cosas.

4.4.25

Debemos vivir todo lo que nos toca vivir. Debemos pasar todo lo que debe pasarnos

TENEMOS LO QUE NECESITAMOS        

No necesitamos más de lo que tenemos porque lo que tenemos es exactamente lo que necesitamos. Si ya tenemos suficiente hambre, ¿por qué deberíamos querer tener más? ¿Y si cuando llega el invierno tenemos frío, porque deberíamos querer tener más frío? ¿Acaso hay alguien que quiera tener aún más problemas de los que ya tiene? ¿O es que quizás quiere que sean aún más graves?

Todos tenemos un montón de problemas. ¿Por qué entonces deberíamos querer tener más? Es obvio que desear más de lo que se tiene es tan absurdo como pretender vivir sin tener que tener problemas, porque la vida no está hecha sólo de lo que nos gusta sino que también forma parte de ella lo que menos lo hace. Y con frecuencia lo que menos nos gusta es lo que más nos conviene.

3.4.25

Para ser una sociedad real debemos aprender a vivir como una comunidad de iguales

UNA SOCIEDAD REAL                                     

EN LA QUE VIVIR ES CONVIVIR

Tenemos la realidad ante las narices ¡y también la sentimos dentro de nosotros!, pero eso no quiere decir que la conozcamos bien. Todo lo que nosotros sabemos se basa en las experiencias que tenemos y en el discernimiento que extraemos, pero por muy ricas y diversas que sean nuestras ideas y experiencias, siempre serán parciales. Tarde o temprano deberemos renunciar a la pretensión de conocer del todo la realidad, porque no podemos abarcarla. La realidad siempre nos supera.

La realidad, en sí misma, no es lo que percibimos de ella. Tampoco es lo que reflexionamos o imaginamos, ni lo que intuimos. La realidad es mucho mayor que todo esto. A pesar de que todo lo que percibimos, sentimos y entendemos es real, la realidad escapa a quedar presa en todo esto. No debemos querer atrapar la realidad, debemos dejar que nos sorprenda ella a nosotros.

2.4.25

Cada uno debe encontrar su sitio y moverse a su aire para pasárselo lo mejor posible

© LA REALIDAD                                        

¿Debemos asumirla tal y como se nos presenta, tal y cómo es?

La situación general es la que es, nos guste más o nos guste menos, y frente a ella sólo caben dos posturas: aceptarla o rechazarla (y quizás también una tercera: pasar de ella).

La cuestión es que muchos (incluido yo mismo) la quisiéramos cambiar, la quisiéramos de otra manera. Al menos, la querríamos más amable y equitativa, más acogedora y estimulante... pero es en vano.

Las cosas son como son, sea por la maldad de quienes disponen del poder material o bien porque es lo que le toca al período destinado a nuestra civilización actual.

1.4.25

Para mí lo importante no es la duración de la existencia sino el modo en que se vive

LA ELECCIÓN DE UNA VIDA MEJOR

Por supuesto, también formo parte del pueblo pero ya no se trata sólo de la ilusión de compartir la misma tierra bajo nuestros pies. Ya no nos unen los mismos ideales, los mismos valores, las mismas ambiciones, ni el significado que le damos a la palabra Humano. La división ya es demasiado profunda y mi única lucha ahora es iluminar a las últimas almas vivas que, como yo, se niegan a mezclarse con la masa de esta sociedad enferma. 

Pero más allá de escribir mis libros, me concentraré en lo que mejor hago y lo que me hace feliz, es decir, mi trabajo como magnetizador taumaturgo. Porque ante este mundo en decadencia, me parece que el único camino honorable es ayudar lo mejor que pueda a quienes aún lo desean. Sanar, calmar, restaurar la energía y la vitalidad de quienes aún saben que vale la pena vivir, incluso en este contexto caótico, es por definición la esencia misma de la vida en la Tierra.